Unicen también adherirá a la Ley Micaela y desarrollará líneas de capacitación obligatoria en género
En el 81 Plenario de Rectores del CIN, las universidades del país se comprometieron a implementar el programa de capacitación para la inclusión. El director de Unicen aseguró que ya están trabajando en el armado de cursos. Además, celebraron los 70 años de gratuidad universitaria, aunque para Tassara aún hay que insistir en políticas de inclusión.
A principio de esta semana se llevó a cabo el 81 Plenario de Rectores integrantes del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) en Córdoba. Allí se abordaron dos asuntos principales, que tuvieron que ver con la adhesión a la Ley Micaela y la celebración de los 70 años de gratuidad universitaria.
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En ese marco, los directivos de todas las universidades del país resolvieron la implementación de la Ley Micaela, que en 2018 creó un Programa Nacional Permanente de Capacitación Institucional en Género y Violencia hacia las mujeres. De esta forma, se comprometieron a aplicar una serie de cursos y talleres obligatorios en género a todos los agentes del sistema, docentes, no docentes y autoridades.
El encuentro fue presidido por el rector de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), quien había llevado esta iniciativa a la reunión del Comité Ejecutivo del CIN que se realizó en febrero de este año, y luego de su propuesta, se resolvió recomendar a las universidades públicas la organización de la capacitación obligatoria en materia de género y violencia contra las mujeres prevista en la Ley Micaela. Asimismo, se encomendará a que la RUGE sea el órgano de consulta, capacitación permanente y asesoramiento en estas temáticas.
Tras la decisión unánime de las máximas autoridades universitarias del país, se prevé que funcione un plan de formación y se instrumenten acciones para frenar la violencia en todas las casas de altos estudios.
En este sentido, el rector de la Universidad Nacional del Centro (Unicen), Roberto Tassara, informó que desde la institución ya están trabajando en el diseño de los cursos, aunque determinó que es necesario encuadrarlos bien para que sean útiles. Agregó que si bien habrá un esquema nacional, no necesariamente todas las entidades seguirán el mismo temario, pero sí abordarán la violencia de género desde lo legal, entre otros aspectos.
Del encuentro también formó parte Néstor García, miembro de la Red Universitaria de Género (RUGE) del CIN y padre de la joven de 21 años que fue asesinada en Gualeguay en abril de 2017, hecho que dio origen a la legislación.
Sin arancel, pero con costos
Por otro lado, en el Plenario celebraron las siete décadas de existencia de la gratuidad en las universidades, conmemorando el decreto del año 1949 que estableció el desarancelamiento de los estudios superiores.
Para Tassara, este hecho histórico fue un complemento justo a la Reforma Universitaria de 1918, que sirvió para democratizar las instituciones y otorgarle un carácter científico, que se inició con una rebelión estudiantil en la UNC entre marzo y octubre de ese año.
“Cuando ha habido gobiernos populares las universidades avanzaban, así fue que Irigoyen y Perón se complementaron en la reforma, que básicamente dio lugar a una apertura importante a que más gente accediera a la enseñanza”, reflexionó.
Además, se refirió a la importancia que tiene este sistema gratuito para la inclusión, aunque destacó que con eso ya no alcanza. Como ha dicho muchas veces, la gratuidad significa no pagar arancel, pero realmente la universidad no es gratis, porque además de sostenerse por el pueblo, los estudiantes que no son del lugar tienen costos elevados. Mientras que los que son de aquí, a veces pueden trabajar y a veces no, pero también tienen un costo de oportunidad que están perdiendo.
“Me parece que las becas, los comedores y las residencias son políticas de inclusión en las que hay que insistir para ir complementando en esta época aquellos logros de años”, manifestó.
Desigualdad en las universidades
Para el papá de Micaela, las universidades están atravesadas por la desigualdad de género. El padre de la joven asesinada en 2017 en Gualeguay, Néstor García, celebró que el CIN abrazara la llamada “Ley Micaela”, para fomentar la capacitación en género y erradicar la violencia hacia las mujeres.
“Tuve la posibilidad de pedirles a los rectores que adhieran a la ley y eso decidieron”, se contentó y recomendó a las universidades que aún no lo hicieron, sumarse al programa de formación en género. “En estos espacios educativos están los dirigentes del futuro, de las empresas, del Estado, de los sindicatos y hay algunos estudiantes que ya son dirigentes. Es un desafío que nos invita a entender la problemática de género, el derecho de la mujer y a apartarse de los estereotipos binarios”, sostuvo García.
Con respecto a la desigualdad, aseveró que en el sistema superior de enseñanza hay más docentes mujeres que hombres, con más varones titulares de cátedra, a la vez que 59 masculinos son rectores y apenas seis son mujeres. Asimismo, cuestionó el hecho de que algunas instituciones, que según su estimación, representan la mitad del total, no tienen un protocolo para abordar la problemática de la violencia hacia la mujer.