Retiro voluntario

A medida que transcurren los años, las fiestas, celebraciones, agasajos y eventos festivos de todo tipo van menguando.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailPodrá decirse que a cierta edad no quedan mayores motivos de festejo. Y posiblemente sea una hipótesis falaz. Poco tiene de meritorio cumplir 20 años; llegar a 50 ya es un logro y superar los 80 es razón más que suficiente para tirar la casa por la ventana. Lo mismo vale para las bodas: casarse a los 30 es motivo para celebrar; pero hacerlo (o volver a hacerlo) a los 60 ó 70, merece una megafiesta.
Sin embargo, para aquellos que hemos dejado atrás la barrera de los 60, las celebraciones vienen cada vez más espaciadas. Y, lógicamente, no nos tienen como protagonistas: bodas ajenas, 15 años, aniversarios de matrimonio, eventos empresariales, etc. Los velorios tienen la característica, al menos por ahora, de ser bastante sobrios.