Mientras recibía la noticia de la muerte de su esposa, entraron a su casa y le robaron la jubilación
El hecho sucedió en Paraguay al 500, en el barrio de Villa Cordobita. Toda la familia se encontraba en el Hospital Santamarina donde falleció la propietaria de la vivienda que fue el blanco del ilícito. Claudia, la nuera de la mujer, expresó que “no es justo, estar pasando por esta situación y que encima les hayan sacado lo poco que tenían”.
Un lamentable episodio de inseguridad se vivió ayer en Paraguay al 500, en la zona de Villa Cordobita con un robo que se perpetró en una casa mientras el propietario se encontraba en el Hospital recibiendo la noticia del fallecimiento de su esposa.
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Claudia, la nuera del matrimonio, contó a El Eco de Tandil que su suegra había tenido un ACV a mediados de enero y quedó con graves secuelas pero recibió el alta justo en el momento en que comenzó la cuarentena.
Como requería de atención permanente, una de las hijas decidió llevarla a su casa, junto a su marido, para poder atenderla con tranquilidad y sin romper el aislamiento.
“La casa de mis suegros quedó a cuidado de uno de sus nietos, de un sobrino mío, que vivía ahí pero salía a trabajar y es en uno de esos momentos que aprovecharon para ingresar”, explicó.
Entraron por un patio de la parte trasera de la casa y luego rompieron la ventana de una habitación. “En el cuarto mi suegro tenía sus cosas, dejaron hecho todo un desastre, y le robaron la jubilación, así que lo poco que tenía se lo robaron”, lamentó.
Y puntualizó que “rompieron ventana, vidrios, es una persiana muy gruesa así que ruido tuvieron que hacer. Encontramos huesos en el patio, así que le han dado de comer al perro para que no los mordiera”.
“Lo que nosotros pensamos es que ellos han estado haciendo un trabajo de hormiga porque una de las noches, tipo 3, le tocaron timbre a mi sobrino. Otro día nos llamó un familiar que vive al lado diciendo que estaba la policía y que andaba alguien en los fondos, fuimos con mi marido y no había nada. Supuestamente habían querido entrar en la casa de otro de los vecinos y cuando llamaron a la policía aparentemente se escondieron en los fondos”, detalló.
“No es justo”
Descubrieron el robo el martes en horas de la mañana. “el lunes tipo 14 la tuvimos que internar a mi suegra en el Hospital y como era una paciente que entraba con un cuadro respiratorio le tuvieron que hacer el hisopado y cumplir con todo el protocolo, entonces al otro día teníamos que esperar el resultado para ver si se podía velar o no”, indicó.
Y continuó relatando que “a las 8 de la mañana nos llamó mi sobrino que él había entrado a la pieza a buscar la bicicleta que tenía guardada para ir a trabajar y se encontró con este panorama, la habitación dada vuelta, todas las pertenencias de los abuelos tiradas en el piso, todo lleno de vidrios, porque rompieron la ventana, todas sus fotos y las cosas de la abuela tiradas en el piso, su ropa, fue horrible, justo con el momento que veníamos viviendo”.
“Le robaron la plata de la jubilación. La ventana da al fondo de la casa, no se ve del lado de la calle”, sostuvo.
Y contó que para su suegro fue terrible, en medio de la situación que estaba viviendo ver “todas sus herramientas, sus cosas, desparramadas en el patio, tenía una colección de cuchillos que no se alcanzaron a llevar, así que no sabemos si cuando llegó mi sobrino todavía estaban adentro de la casa”.
A su vez, explicó que sólo pudieron ingresar a esa habitación porque como estaba cerrada con llave no lograron acceder al resto de la vivienda.
En tanto, señaló que “60 años de casados tenían, sentir que le violentaron su casa donde vivieron toda su vida, le robaron su pobre jubilación, y el doble dolor de haber perdido a su compañera de toda la vida. Es horrible”.
“Ni llamamos a la policía porque estábamos con la cabeza en otro lado, no podíamos esperar que viniera la policía, teníamos que tapar la ventana rota e irnos para hacer los tramites del velorio”, afirmó.
En cuanto al dinero sustraído, puntualizó que “era la jubilación que mi suegra había cobrado y mi suegro la había llevado a la casa para poder pagar sus cuentas, con la esperanza de volver a su casa con mi suegra y resulta que no pasó ninguna de las dos cosas, ni pudo volver con mi suegra ni tenía el dinero”.