Inseguridad vial
Murió una joven olavarriense y tres personas resultaron heridas en un vuelco en la Ruta 226
El trágico hecho ocurrió en el Km 200 de la Ruta Nacional 226, a la altura de La Pastora. Una camioneta Ford EcoSport se despistó luego de que su conductor efectuara una maniobra para eludir a un animal silvestre. La adolescente oriunda de Olavarría falleció en el acto y los otros tres ocupantes del vehículo sufrieron heridas leves.
Un fatal accidente vial se produjo ayer por la madrugada, en el kilómetro 200 de la Ruta Nacional 226, a la altura del acceso a La Pastora, en sentido hacia Azul, en el que perdió la vida Brisa Ojeda, una joven de 19 años oriunda de Olavarría.
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Según detallaron fuentes policiales, la víctima –que falleció en el acto- viajaba junto a otras tres personas en una camioneta Ford EcoSport, dominio NVO 825, conducida por Juan Pablo Tarántola, de 27 años, residente de Sierras Bayas.
De acuerdo a las primeras informaciones, Tarántola habría intentado esquivar a un animal que se le cruzó en la cinta asfáltica y, al volantear, perdió el control del vehículo, que dio varios tumbos y terminó sobre la banquina con severos daños.
En la camioneta también viajaban Santiago Tambucci (24, Sierras Bayas) y Shirley Frías (25, Olavarría), quienes fueron asistidos por dotaciones del SAME y trasladados al Hospital Municipal Ramón Santamarina.
Tambucci y Tarántola sufrieron traumatismos leves, recibieron atenciones y fueron dados de alta con pautas de alarma. En tanto, Frías registró politraumatismos leves y permanece internada en observación en el Servicio de Emergencias Médicas.
La causa fue caratulada como “Homicidio culposo y lesiones culposas”, con intervención de la Unidad Fiscal de Instrucción 8, a cargo del doctor Gustavo Morey. Trabajaron en el lugar de los hechos efectivos del destacamento de Policía Vial, Cuartel Central de Bomberos y dos ambulancias del SAME.
Animales sueltos
El incidente vial ocurrió en una recta en un momento de buen clima, pero la irrupción intempestiva del animal en medio de la noche obligó al conductor del rodado a efectuar una maniobra de evasión que finalmente no pudo controlar. Sobre la base de los datos recolectados, se trataría de un ciervo silvestre, una especie común en la zona.
No obstante, al contrario de lo que sucede con el ganado bovino y equino suelto, los accidentes ocasionados por la presencia de fauna silvestre en la ruta configuran un caso fortuito.
De esta manera, el atropello de animales silvestres como reptiles, mulitas o armadillos, ciervos, jabalíes y zorros suele presentar dificultades a la hora de trabajar en la prevención. Al ser animales salvajes, estos tienden a escapar a lo que desconocen, ahuyentados por el ruido de los motores y por las luces de los vehículos y haciéndolo velozmente durante la noche.
Un informe de enero de 2022 de la Dirección Nacional de Observatorio Vial del Ministerio de Transporte de la Nación evidenció que la mayoría de los siniestros viales vinculados al atropello de animales en rutas nacionales y autopistas de Argentina ocurre durante la noche (64,5 por ciento).
Claramente, es la “noche” la que ofrece el escenario más propicio para la ocurrencia de siniestros viales de este tipo, debido a que los animales durante las horas nocturnas perciben menos movimiento y sonido, y menor posibilidad de prever una situación de riesgo. Lo mismo sucede con los conductores de vehículos: la nocturnidad disminuye las oportunidades de previsión y altera el tiempo de reacción. La falta de señalización promueve también la mayor probabilidad de que esta tipología de siniestros viales aumente.
El momento de la aparición es en general instantáneo, dando muy poco margen de maniobra para su esquive y creando sorpresa a los automovilistas que, en muchos casos, resultan con heridas o pierden la vida producto del despiste del vehículo y no tanto de la colisión contra el animal.