Vandalismo: arrojaron tres adoquines y rompieron el blindex de una sucursal de Luz Azul
Un inusual hecho de inseguridad se registró el pasado jueves por la madrugada en la sucursal de Luz Azul ubicada en la intersección de las calles Belgrano y 4 de Abril, donde algunos vándalos rompieron la vidriera con adoquines y, ante el alerta de los vecinos, se dieron a la fuga.
Recibí las noticias en tu email
Si bien los motivos del hecho se desconocen ya que no sustrajeron nada, los malvivientes arrojaron tres piedras contra uno de los blindex laterales del comercio que terminaron cayendo dentro del local y rompiendo el porcelanato del piso.
Agustín Rodríguez, titular de la franquicia de productos lácteos en Tandil, dialogó con El Eco Multimedios y comentó que el accionar de los residentes del barrio ante el suceso fue “muy positivo”.
“Los vecinos reaccionaron por el ruido, creo que los chicos salieron corriendo y no sé si los encontraron. Cuando hice la denuncia en la Comisaría Primera les pregunté, pero la información que me brindaron es medio vaga”, detalló Rodríguez y agregó que “me parece que gracias a que reaccionaron los vecinos y al estampido que hicieron fue que salieron corriendo”.
Cuando los proyectiles ingresaron a la sucursal, las cortinas black out oficiaron como amortiguadoras e impidieron que los daños internos fueran mayores. No obstante, golpearon contra uno de los muebles y derribaron todos los artículos que se encontraban en él, causando cierto desorden.
“La gente reaccionó porque el estruendo de los adoquines rompiendo el blindex debe ser tremendo. Y si bien entraron las tres piedras, solo hay dos agujeros: uno más grande y otro más chico”, detalló.
En las cámaras de seguridad internas del negocio solo se puede observar cómo ingresan las piedras pero no se alcanzan a divisar a quiénes las arrojaron. Por tal motivo, Rodríguez evaluó que la Policía seguramente pedirá las grabaciones del Centro de Monitoreo o de algún dispositivo privado de los vecinos.
“A nosotros no nos generó casi ningún inconveniente, solo perder tiempo en hacer la denuncia y llamar al seguro”, clamó el dueño del negocio luego de informar que ese mismo día cambiaron el vidrio roto.