El área de Economía pidió prórroga para presentar el presupuesto que será menor en términos reales
Para avanzar con la ordenanza madre, el secretario Daniel Binando depende de la información sobre las variables macroeconómicas y las políticas presupuestarias que implementarán los nuevos gobiernos de Provincia y Nación, pero además de los anuncios del Intendente sobre el gabinete para su quinto mandato. Anticipó que “será un presupuesto menor en términos reales”, ya que “el poder adquisitivo de ese monto va a ser mucho menor que el de 2019”.
El secretario de Economía del Municipio, Daniel Binando, presentó ante el Concejo Deliberante el pedido de prórroga para la elevación del Presupuesto 2020, ante la falta de certezas por el período electoral. Fundamentó la solicitud en la falta de precisiones sobre las variables macroeconómicas, la necesidad de contar con información de los gobiernos provincial y nacional, y desde el punto de vista político, la asunción del quinto mandato de Miguel Lunghi, quien debe tener “manos libres” para armar su mejor gabinete de cara a los próximos cuatro años.
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De acuerdo a las leyes vigentes, el Ejecutivo tenía plazo hasta hoy para presentar el presupuesto, aunque está contemplada la extensión de los plazos. En tanto, el Legislativo, con su nueva conformación, tendrá plazo hasta el 31 de diciembre para el tratamiento y la votación. Desde Economía pretenden elevarlo a mediados de diciembre, para que los concejales tengan 15 días para estudiarlo.
“Ha habido tanto revuelo macroeconómico, que si nosotros trasladáramos el presupuesto tal cual lo que hicimos en octubre del año pasado, lo que tendríamos que actualizar sería impresionante. Habría cifras del 70 u 80 por ciento. Por lo tanto, sabemos que es imposible hacerlo así. Entonces estamos viendo distintas alternativas de cómo remodelar el presupuesto”, indicó el secretario.
El autor de los proyectos de las últimas cuatro gestiones de Lunghi, explicó que “hay dos condiciones. Una es que el 50 por ciento sí lo podemos manejar, que es nuestro, que es la recaudación propia. Ahora el otro 50 por ciento con que siempre cuenta el Municipio de Tandil viene de la Provincia y no sabemos qué es lo que opina (Axel) Kicillof económicamente y tampoco han empezado la transición para tener algún dato de cómo van a manejar el presupuesto provincial”.
En principio, el secretario analizó que sería imposible aplicar un aumento de las tasas del 80 por ciento, por lo cual se deberán ajustar los gastos en las diferentes áreas. “Yo tiro las variables económicas, después cada uno de los secretarios de las áreas deberá decir en qué puede ajustar o no, hacer una escala de prioridades y atención”, indicó.
Los cambios
Por otra parte, Binando informó que empezó a trabajar en el armado del presupuesto, pero teniendo en claro que el jefe comunal podría nombrar a otra persona en Economía, como así también en las secretarías que deben definir obras, programas y prioridades para el ejercicio 2020.
“Yo puedo decir que este año Obras Públicas tuvo equis cantidad de pesos y calculo un 50 ó 60 por ciento más con respecto a esos valores, pero en qué va a gastar me lo va a tener que decir el que va a tener la responsabilidad de llevar adelante el área. Entonces, también en ese sentido tengo que esperar la resolución política del Intendente de todo su gabinete, incluido yo, de quiénes continúan y a quiénes reemplaza o qué cambios estructurales hace”, dijo.
Las tasas
Binando adelantó que “lo que yo puedo hacer hoy son hipótesis del 50 por ciento de los recursos. Generalmente un presupuesto se comienza por las posibilidades de tener dinero. Es como en una casa: gasto de acuerdo a lo que gano de sueldo; planifico mi economía familiar de acuerdo al salario que ingresa en el grupo familiar, después vemos en qué lo gastamos. Armar el presupuesto es bastante parecido a eso”.
A partir de esa teoría, indicó que hoy cuenta en primer lugar con “los recursos propios: hasta cuánto podemos llegar a tener recursos propios, que es el 50 por ciento del Municipio, y el otro 50 por ciento, que siempre vino de la Provincia, tengo que esperar a que me lo digan en la macrofiscal las nuevas autoridades en Economía que ponga Axel Kicillof”.
No arriesgó estimaciones sobre el porcentaje en que se podrían ajustar las tasas el año próximo. “Eso es lo que estamos estudiando”, dijo y detalló que “estamos haciendo ensayos, estamos revisando bien qué nivel de cobrabilidad hemos tenido por zonas, porque tampoco quiero decir ‘esta es la actualización, la aplico’, porque la capacidad adquisitiva de la gente ha mermado”.
Sin embargo, anticipó que “será un presupuesto menor en términos reales, no constantes, porque con la devaluación e inflación, seguramente el monto va a ser mayor pero el poder adquisitivo de ese monto va a ser mucho menor, el de 2020 que el de 2019”.
En ese sentido, aclaró que “obviamente que nos encantaría hacer 300 obras que tenemos en carpeta, pero para eso se necesitan recursos. Los proyectos se solidifican y se hacen reales cuando los hacemos sustentables, o sea que los podemos financiar. Sabemos que estamos en estos momentos en una crisis en el país, donde los salarios han perdido capacidad adquisitiva, donde la producción ha bajado. Entonces, hasta que no salgamos de esto, no podemos formular un presupuesto que sea de crecimiento. Tiene que ser un presupuesto muy acotado, porque es realmente la capacidad que vamos a tener los vecinos de Tandil”.
Inflación y cobrabilidad
Con respecto a la inflación, desde la óptica municipal, sostuvo que es variable. Por caso, expuso que en salud muchos insumos subieron el ciento por ciento; todo lo relacionado con el valor del dólar, como hierro, electromedicina, componentes electrónicos, está por arriba del ciento por ciento; otros elementos se movieron un 30 ó 40 por ciento.
“Nosotros compramos alimentos y en la última semana hubo una movilidad, lo vemos en las encuestas de precios que se hacen semanalmente a través del Indec. Hubo aumentos de 4 ó 5 puntos sin mucho justificativo, tal vez por especulación de los formadores de precios, pero se trasladaron y eso no lo teníamos previsto hace una semana atrás. Entonces, en algún momento tenemos que decir ‘nuestra previsión va a ser así’, pero necesitamos para esa previsión que coincidamos con la Provincia y con la Nación que todavía no tenemos datos”, puntualizó.
En relación a la cobrabilidad, valoró que “hay una respuesta del tandilense extraordinaria. Creo que hay muchas familias que han pagado sus impuestos reduciendo el gasto en otra cosa y sin dejar de aportar a la Municipalidad. Tenemos buenos índices de las tasas prediales. Para la crisis que tenemos realmente ha sido muy buena. El sector comercial, a pesar de disminuir las ventas, ha respondido en la TUAE”.
Desde un análisis político, evaluó que “creo que es un poco, junto al voto Miguel Lunghi, decir que es un Municipio que presta los servicios, entonces la gente siente que esa plata que coloca vuelve o en el Hospital, o las calles que hemos asfaltado, o la luz led de las calles, etc. Son todas cosas que van mejorando la calidad de vida. Por lo menos, desde lo que es la atención de una empresa comunal de servicios y de lo que cobra sus tasas”.
El tratamiento
Adelantó que ante la falta de certezas, pidió una prórroga del plazo, que vence hoy, al Concejo Deliberante. “Las fechas electorales están muy cerca de lo que dicen las leyes presupuestarias. El 31 yo tenía que presentar el presupuesto en el Concejo Deliberante y pedí la prórroga hasta diciembre para poder presentarlo, porque además va a haber una nueva conformación del Concejo Deliberante que es el que va a estar atento a este presupuesto, por lo tanto también tengo que respetar que los nuevos concejales que entren tengan desde la base del inicio cómo es un presupuesto”.
El panorama es complicado en cuanto a los tiempos y la falta de precisiones. En eses sentido, refirió que “el presupuesto a nivel nacional lo elevaron en término y lo van a tener que modificar porque después de las PASO cambiaron totalmente las variables macroeconómicas que se habían presentado”.
Una crisis similar a la del inicio
del gobierno de Carlos Menem
En cuanto al panorama actual, Daniel Binando evaluó que “macroeconómicamente, una reactivación de la economía sin el acompañamiento de un producto provoca inflación. Todos hablan de 2001, pero me acuerdo cuando asumió Carlos Menem, que venía con el salariazo y poner más plata en el consumo interno, caímos en la segunda hiperinflación”.
Consideró que “no es tan sencillo como se expresa en campaña. No olvidemos que hasta que vino el Plan de Convertibilidad, era una situación muy parecida a lo que ocurrió en el comienzo del gobierno de Carlos Menem, con tres ministros de Economía: el primer Plan Bunge y Born que fracasó y nos llevó a la segunda hiperinflación, la primera la tuvimos con Alfonsín; ahí vino Erman González, donde incautó los plazos fijos e implementó el Plan Bonex, estabilizó la economía y después vino recién, con (Domingo) Cavallo, un tercer período económico, donde dos años después de la convertibilidad logramos bajar la inflación y empezar a aumentar la productividad”.
Y agregó que “por eso, cuando el presidente electo dice ‘va a ser difícil’, creo que se da cuenta de que esto ya sucedió en la repetitiva historia argentina, económica al menos”.
Binando indicó que “como hay una fuerte demanda frenada en la Argentina internamente, se va a ocasionar una estampida de precios y lo que se necesitan son recursos. Lo primero que tendríamos que hacer es ir con un consumo interno bajo y conseguir un mercado donde nos entren dólares para así empezar a estabilizar la economía”.
En ese sentido, advirtió que “las fábricas, por más que tengan capacidad ociosa en su productividad, no se reactivan de hoy para mañana, tienen que hacer toda una cadena desde los insumos y después en el tramo final la logística, saber dónde van a colocar la producción. Todo eso tiene una complejidad, y van a ser durante 2020 meses muy difíciles. Si fuera muy optimista, armaría un presupuesto muy parecido al 2019 con la misma capacidad de generación del Municipio y sabemos que la capacidad contributiva de la gente no va a ser así”.
Por último, expresó que “no quiero ser portador de malas noticias, pero la realidad me señala que la Argentina tiene 70 años de inflación, no la vamos a parar en un año. No nos engañemos, no vamos a llegar en un año a un dígito”.
