El recambio de luminarias a LED se ejecuta sin autorización del Concejo y con irregularidades
Está pendiente de aprobación el listado de las obras -aunque ya están en marcha- financiadas con 20 millones de pesos del fondo afectado creado por la Ordenanza 2505. El concejal Facundo Llano anticipó que hará una consulta al Tribunal de Cuentas por la compra irregular de las lámparas. Además, expuso que es necesario cerrar el capítulo de la deuda por la concesión del servicio y el alumbrado antes que avanzar con el proyecto actual.
Una vez más, los concejales de la oposición apuntan sus miradas a la Usina Popular y Municipal de Tandil, a partir del tratamiento de un proyecto de ordenanza para autorizar obras de recambio de 2400 luminarias LED, de las cuales 1620 serán financiadas con recursos de la Ordenanza 2505. Si bien el Concejo Deliberante aún no dio el visto bueno, ya comenzó el reemplazo de las lámparas.
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Sumado a eso, la empresa de economía mixta realizó un concurso de precios para comprar las LED, por lo cual la comuna evadió la licitación que exige la norma especial para invertir los recursos públicos.
El tercer elemento que disparó los reparos a la iniciativa es que aún no se resolvió el expediente de la “adenda al Acuerdo de Accionista”, a partir del cual salió a la luz la deuda que la Usina mantenía con el Municipio en cuanto a las obligaciones de obras que le impone la concesión del servicio eléctrico y de alumbrado en el partido de Tandil.
“Nadie discute que el partido de Tandil tenga que tener LED. Al contrario, es magnífico que tenga LED, pero quién lo paga y en detrimento de quién, porque camino en la periferia y está oscura, la gente está reclamando los servicios de iluminación”, destacó el justicialista Facundo Llano al analizar las cuestiones por las cuales no acompañará el proyecto de ordenanza elevado por el Ejecutivo.
En la Ordenanza del Presupuesto 2019 se desafectaron, en forma anticipada, los 20 millones de pesos del fondo especial de la 2505 con destino a modernizar el alumbrado. Ahora, el Ejecutivo requiere que el Legislativo autorice las obras puntuales que ya se están desarrollando.
Al Tribunal de Cuentas
De las 2400 LED que se instalarán en calles y avenidas, 1620 se pagarán con recursos municipales y 780 las costeará la Usina como parte de sus obligaciones como concesionario.
El justicialista Llano objetó que el recambio ya está en ejecución pese a que aún no se aprobó, pero además remarcó que en el expediente “la Usina está diciendo que hizo un concurso de precios, cuando en realidad eso también hay que verlo, porque es plata del Estado no es plata de la Usina. Tienen que hacer una licitación y lo dice la Ordenanza 2505; tiene que haber un trámite licitatorio de acuerdo a normas administrativas vigentes en materia de contratación de obras públicas”.
Llano sostuvo que la Usina es el ente ejecutor de la obra, pero corresponde al Municipio, por licitación, realizar la compra de las LED para invertir los 20 millones de pesos del fondo afectado.
En el expediente se agregaron las fotocopias de las dos cotizaciones por las 2400 luminarias que proveedores hicieron a pedido de la Usina. “Es materia de análisis. Usar fondos afectados del Municipio, permitirle que los gaste la Usina, tiene que ser materia de revisión y diría que de objeción del Tribunal de Cuentas”, dijo el legislador justicialista y anticipó que elevará una consulta al órgano de contralor.
Sobre su postura, adelantó que “no puedo votar esto” e insistió en que el proyecto “ya tiene principio de ejecución”.
Una materia pendiente
Como otro argumento, Llano recordó que “tenemos pendiente el mal llamado Acuerdo de Accionistas, que tiene relación directa. Quedaron en compromiso de decir cómo se había cumplido y nunca pasó nada”.
De ese modo, hizo referencia a la deuda que generó la Usina con el Municipio, entre 2010 y 2018, a partir de incumplir con las obras de extensión, recambio de postes y transformación del alumbrado que son parte de sus obligaciones contractuales.
“La Usina es la concesionaria del servicio de energía eléctrica y comercialización, y a su vez, responsable del alumbrado público, por una concesión que le otorga el Municipio de Tandil. Por ende, no debe haber Acuerdo de Accionistas; tiene que haber, eventualmente, acuerdo de concesionario con concedente, porque tanto la extensión, la transformación y el recambio son parte de esa obligación que tiene la Usina como concesionario”, remarcó.
Por ese motivo, advirtió que “no se pueden poner de acuerdo la parte pública y la privada de la Usina para decirnos a nosotros, Estado municipal, cómo van a cumplir esas obligaciones. El Estado municipal es el que se las tiene que hacer cumplir a la Usina en su carácter de concesionario”.
Tras aclarar ese punto, informó que hace algunas semanas, elevaron una planilla con la deuda acumulada desde 2010, de donde surge que la Usina debía 23 millones de pesos hasta 2018, y que comprometió obras por 18 millones, que ya se habrían completado. Sin embargo, los concejales del oficialismo no pudieron despejar las dudas que surgieron en torno a ese documento, que tampoco dispone de un informe firmado por autoridades competentes que determine cómo la empresa se puso al día.
Por eso, reclamó aclaraciones “de algún encargado que nos explique cómo se está desarrollando la concesión, cuáles son las obligaciones incumplidas por parte de la Usina, cuál es el desarrollo del acuerdo que hicieron, qué es lo pendiente, cómo están los ejercicios económicos, cuáles son las obligaciones adicionales que tiene la Usina y si las está cumpliendo, si se aplican los beneficios (a determinados usuarios establecidos por ordenanza), y después empezamos a discutir el expediente de la 2505”.
A esta altura, sostuvo que tendría que subir un representante del Ejecutivo con los síndicos públicos que forman parte del directorio para explicar la marcha de la concesión.
En relación a los fondos afectados, reiteró que “la Usina es agente de recaudación, como pasa con el Fondo del Gas. Es dinero del Municipio. Ahora, ese dinero del Municipio ya fue a concurso de precios, ya se lo están gastando y además, nos dicen a nosotros en qué gastarlo, y nosotros pagamos 1620 LED y ellos 780, y no explican cómo hicieron con todo lo que deben durante muchos años. Estamos en una indefensión total como Estado municipal”.
“Falta la pata del Estado municipal”
Facundo Llano repasó las ordenanzas que regulan la concesión del servicio público de distribución y comercialización de energía eléctrica y de alumbrado público. La norma 8449, que le otorgó a la Usina la concesión por 30 años (desde 2005 hasta agosto de 2035), establece la obligación de extender, recambiar los postes y transformar el alumbrado.
“Del contrato de concesión surge la provisión exclusiva del servicio público de concesión y comercialización de energía eléctrica del alumbrado público, las obligaciones de extensión y recambio, y a su vez, otro tipo de compromisos, por ejemplo, la bonificación en las tarifas al Municipio y a las reparticiones públicas, al Hospital, policía, hogares de ancianos”.
Por ende, concluyó que la empresa incumplió la concesión, no un contrato entre accionistas, y consideró que “lo que nos está faltando es la pata del Estado municipal en su carácter de concedente. Nos estamos llevando por lo que dice la Usina en cómo se ejecuta el acuerdo de concesión. Está bien, hay una parte pública, pero también hay una parte privada y es otra figura jurídica. No es el Estado municipal, al contrario, es el concesionario. Es como que nosotros nos llevemos por lo que nos diga la Cámara de Transporte”.
“Ya lo están haciendo y es mucha plata”
De acuerdo con el expediente que se trata en la Comisión de Economía del Deliberativo, el plan para el recambio de 2400 luminarias a LED se concretará en 8 meses, hasta junio, fecha en que cierra el balance de la Usina.
“Considerando que el ejercicio económico de la Usina culmina en junio, se propone ejecutar, por el Acuerdo de Accionistas, el recambio de 780 luminarias que cubrirían el cupo de transformación del presente ejercicio y el resto, en caso de ser aprobado con autorización del Concejo Deliberante, para ejecutar a través del fondo recaudador por la Ordenanza 2505”, señala la propuesta elevada por el Ejecutivo.
“Ya lo están haciendo y es mucha plata. No está claro el Acuerdo de Accionistas, no está claro el cumplimiento de la concesión. No está equilibrada la fuerza con la Usina”, cuestionó el justicialista Facundo Llano.
Coincidió en que “la reconversión a LED es lo que se viene, es lo que tenemos que hacer y vamos a gastar menos de alumbrado”, pero dijo que es necesario analizar la oportunidad para invertir 20 millones de pesos.
Al fundamentar su postura, describió “un contexto en el que tenemos aumento de tarifas; estamos discutiendo la tasa de alumbrado; estamos discutiendo las tasas que tienen que ir o no en los servicios de gas y luz; en el que no sabemos si la Usina cumplió con los requerimientos y las otras demandas que puede haber”.
Al mismo tiempo, reseñó que “no estamos contemplando la extensión de alumbrado público, el recambio en los barrios y en las zonas periféricas, en las arterias de mayor circulación, que no necesariamente son las del centro en algunas oportunidades”.
“Es una política electoralista”
“Esto es un apuro de campaña”, concluyó el concejal Facundo Llano con respecto al proyecto para transformar parte del alumbrado a LED y agregó que “se apuraron a hacerlo porque es una política electoralista”.
Sumado a eso, informó que la Usina cobrará por la contratación de mano de obra, el proyecto y la inspección, ya que ejecuta la iniciativa. “Es un negocio millonario en el que sólo gana la Usina. La gente pone”, deslizó.
Y agregó que “yo creo que se tendría que hacer bien. Se puede hacer bien, pidiendo a la Usina que haga un esfuerzo, ya que durante 10 años no cumplió. Actualicemos esos diez años, porque no solamente nos deben, sino que están obteniendo dividendos”.
En ese sentido, evaluó que los gobiernos de Cambiemos asumen el costo político de los incrementos de las tarifas y las empresas distribuidoras de energía obtienen los beneficios económicos. Desde esa óptica, propuso que “en esta empresa, que tenemos la suerte de ser parte mayoritaria, volquemos los esfuerzos al desarrollo, la producción, me parece que es lo más sensato, y mucho más cuando la otra parte también está interesada en eso, o debería estarlo, porque sus propios asociados son los que le están diciendo que necesitan refinanciación, tarifas especiales, que no les arranquen la cabeza con los intereses”.