Un fin de semana agridulce para Pernía
El sábado Leo Pernía tuvo una jornada agridulce y no pareció disfrutar del podio, por discrepancias con el equipo oficial Renault.
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Como señaláramos en nuestra edición de la víspera, sorprendentemente la mayoría tuvo que detenerse para cambiar neumáticos deteriorados y justo en mitad de carrera – ronda 18 – también el de Tandil debió hacerlo cuando marchaba cuarto, con la fortuna de que no perdió la vuelta ni mucha distancia con el pelotón, gracias al ingreso del pace car tras el despiste de Urcera, quien era líder hasta ese momento.
En el relanzamiento quedó décimo y ya con mejor ritmo – otros desertaron o comenzaron a girar más lento para no romper gomas – fue avanzando en el clasificador hasta terminar tercero a la cola de Rossi y Santero.
Sin embargo, no hubo alegría en su 13er podio. Visiblemente molesto con la decisión de Renault, se limitó a decir “Me tuvieron cuatro o cinco vueltas detrás de mi compañero Gagliardi Gené y mi auto levantó temperatura. Con orden de equipo, lo hubiese superado diez minutos antes, y ganaba la carrera.”.
Ayer largó la segunda final del fin de semana desde el quinto lugar y solo gracias a sus buenos reflejos pudo esquivar a Urcera, que tuvo un toque con Canapino y fue embestido por Santero. El de Tandil zafó de la situación imprevista, aunque fue superado por varias máquinas y quedó décimo.
Después, en una carrera lineal y aburrida, se preocupó más por cuidarse de que no lo pasara Ardusso que de intentar superar a Ciarrocchi.
Dos abandonos le permitieron avanzar sendos lugares, y así pudo terminar 8vo. a más de 27 segundos de Matías Rossi.
Abandono de Tiago
Tiago, hijo de Leonel Pernía, tras terminar cuarto en la primera final del sábado, se vio obligado a abandonar en la segunda final que ayer se disputó en el Autódromo Oscar Cabalén de Córdoba. El joven piloto de 16 años marchaba séptimo cuando un problema en su planta impulsora lo dejó al margen de la competencia.