El empresariado comprometió acciones directas dentro del Consejo Económico y Social
A casi dos meses de la puesta en marcha de la herramienta articulada por el Gobierno local, la empresaria Moira Sampedro brindó su mirada sobre la participación del sector privado dentro de un espacio donde el Municipio y los distintos actores de la comunidad confluyen para diagnosticar y dar respuesta frente a la crisis.
Desde que Consejo Económico y Social comenzó a funcionar a mediados de diciembre bajo la participación y el compromiso de los concurrentes, las voces de quienes supieron ser artífices de la iniciativa se han sumado con la experiencia desde el sector público pero también han destacado el acompañamiento y los aportes de quienes representan al ámbito privado en la ciudad.
Recibí las noticias en tu email
La herramienta, impulsada desde el seno del Concejo Deliberante por el concejal justicialista Facundo Llano, cosechó en estos dos meses de actividad una importante cantidad de asistentes que buscan bajo dos grandes ejes, el social y el productivo, encontrar soluciones que en el mediano plazo puedan reflejarse en acciones concretas para atender la demanda social.
Consultada por El Eco Multimedios, Moira Sampedro, quien desde octubre de 2018 se desempeña como presidente de la Asociación de Mujeres Empresarias (AMEP) ofreció un análisis de los encuentros que desarrollaron hasta el momento.
-En primera instancia Moira, ¿qué es AMEP y cuáles sus objetivos?
-Es un espacio fundado en el año 2015 e integrado por mujeres empresarias, emprendedoras y profesionales de la ciudad que buscan potenciarse y acompañarse en el desarrollo de su actividad. Cuando nuestra tarea se inició hace más de tres años, éramos 14 mujeres y actualmente somos más de 150 que trabajamos de forma ininterrumpida, como una red que brinda apoyo, información y capacitación. Además, en el seno de nuestra asociación brindamos cursos de formación que se extienden de febrero a diciembre.
También participamos en eventos vinculados a la problemática de las mujeres, desde acontecimientos de carácter regional como mujeres rurales hasta otros de interés global como el W20, aportando siempre nuestra mirada particular sobre las vicisitudes que enfrenta el género a la hora de desarrollar un emprendimiento, ejercer su profesión o llevar adelante una empresa.
Por otro lado y como parte fundamental de la labor de esta asociación, buscamos acercarnos las unas a las otras, generando contactos con otras mujeres que nos aportan su experiencia y visión, así como nuevas relaciones personales y nuevas oportunidades laborales.
Desde el año pasado nos hemos dividido en cuatro comisiones que se focalizan en grupos específicos como la comisión de jóvenes emprendedoras, la de profesionales, la de comunicación y la itinerante, integrada por un grupo de mujeres que promueven la generación de espacios similares en la región. También participamos de cámaras y asociaciones a nivel nacional e internacional, que han favorecido el establecimiento de relaciones comerciales aquí y en el exterior a muchas de nuestras asociadas .
-En particular, ¿Cuál fue la razón que motorizó su participación dentro del Consejo Económico y Social?
-Fuimos convocadas desde desarrollo local para participar y nos pareció muy interesante ser parte de los debates que se van entablando en nuestra comunidad tanto en materia social como económica. Considerando que esta problemática nos afecta directa o indirectamente. Pero por otra parte, también nos permite realizar un aporte dentro de este espacio de discusión bajo la visión femenina desde un rol poco tradicional como es el de la mujer al frente de un emprendimiento.
-Después de varias reuniones ¿Advierte más similitudes que diferencias en relación a cómo es la mirada del sector público y la del privado en el contexto por el que se atraviesa?
-La mirada es la misma, es una mirada preocupada por la situación que transita nuestro país. Lo que cambia es el enfoque a la hora de pensar los problemas y plantear soluciones, porque cada uno lo ve desde el lugar donde está parado y desde los instrumentos que maneja. En este aspecto hay tantas miradas como integrantes y esta diversidad, a la hora de pensar una problemática, enriquece y nos permite situarnos en el lugar del otro. Puntualmente entre el sector público y el privado la diferencia más notable que percibo es el manejo de los tiempos para llevar adelante una determinada acción. El sector público está supeditado a diversos factores como la burocracia, que ralentiza la toma de decisiones, mientras que en el sector que represento raramente ocurre. La eficiencia y la obtención de resultados son puntos de desencuentro. Y con respecto a los puntos en común entre los diversos actores que componen este espacio, debo destacar el interés, el respeto mutuo, el tiempo destinado, la capacidad de escucha y la búsqueda de consensos entre sus integrantes.
-Más allá del espacio de debate, ¿hay algún avance significativo o medida concreta que haya surgido en este tiempo?
-El Consejo se reúne hace poco más de un mes, no obstante ya inició acciones concretas tendientes a promover la venta de productos hechos en Tandil en los supermercados locales. Hemos conversado con el gerente de Carrefour, quien ha recibido la propuesta con muy buena predisposición y esperamos en breve concretar reuniones similares con la dirección de la firma Monarca y las bocas de expendio del Sr Lin. Nuestro objetivo es que en todos los supermercados de la ciudad, exista una góndola con productos manufacturados aquí. También estamos elevando en estos días una nota a ARBA, solicitando la ampliación de los montos de la resolución 44/18 de 2 a 20 millones y el embargo en las cuentas por el monto adeudado y no por el total de los fondos, como se hace hasta ahora. Además se avanzó en relación a las cooperativas que producen verduras en Tandil para que puedan vender sus productos al Municipio y el sector privado se comprometió a difundir y realizar contactos para dar a conocer esta industria. Si bien en todo momento hemos contado con el interés y la buena predisposición de todos, la realidad es que la implementación de acciones estructurales y profundas excede nuestro ámbito y competencias y requieren no solo tiempo, sino también de la participación activa de aquellos actores políticos que tienen participación en ámbitos legislativos y de toma de decisiones.
-Por lo general el Estado recurre al sector privado y solicita ‘un esfuerzo’ cuando la marcha de algunas políticas crean escenarios como el actual ¿se les ha solicitado algún aporte en este sentido o por el contrario lo han ofrecido?
-El Estado en primer lugar nos brindó información acerca de la realidad de la ciudad y de la oferta de productos elaborados que hay en ella y por otro, nos propuso al empresariado favorecer la compra de lo que se elabore en la ciudad, como una especie de “compre Tandil”. Esta propuesta fue muy bien recibida por nuestra parte pues coincide con los objetivos que permanentemente promovemos desde la AMEP, y a su vez nos permitió conocer y difundir una amplia variedad de manufacturas locales que desconocíamos. Creo que promover y consumir productos elaborados en Tandil nos ayuda a mejorar la calidad de lo que hacemos y nos estimula como empresarios a ampliar el mercado más allá de nuestra frontera. Nuestro aporte a esta propuesta es asesorar acerca de las condiciones que se deben tener en cuenta al momento de ofrecer estos artículos y cuáles pueden ser los posibles obstáculos que no están viendo las cooperativas o los microemprendedores y que son fundamentales para integrarse y sostenerse en el mercado actual.