El testimonio del conductor del camión con gas butano: "volví en mí cuando ya estaba en el hospital"
El hombre comentó que le fallaron los frenos, y que perdió el conocimiento al momento del vuelco.
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El transportista que se dirigía hacia la planta de Gas 10 en la localidad de Dolores y que esta mañana protagonizó un impactante accidente al verse obligado a volcar su camión cargado con butano tras sufrir una falla mecánica en los frenos, brindó su testimonio sobre lo ocurrido en diálogo con El Eco Multimedios.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailComentó que el incidente ocurrió luego de superar una leve subida, justo en el tramo de descenso que desemboca en la rotonda que une las rutas 74 y 226, donde el conductor intentó reducir la velocidad de la pesada unidad sin obtener respuesta del sistema de frenado. Ante la inminencia del siniestro, el chofer relató que intentó frenar el vehículo lo más posible utilizando la caja de cambios, pero aun así ingresó a la rotonda con una velocidad excesiva para la maniobra. En esos segundos críticos, el conductor se vio ante una disyuntiva de impactar contra una garita cementada, dirigirse hacia un obrador donde se encontraban trabajadores al costado de la ruta, o provocar el vuelco lo más controlado posible de la unidad.
"Lamentablemente no he entrado muy en velocidad, pero sí más que lo que debes para tomar la rotonda", explicó sobre el momento en que perdió el control mecánico. Al analizar las opciones, el transportista detalló que chocar contra la estructura de cemento hubiera sido fatal para él, mientras que la zona del obrador ponía en riesgo a terceros. Finalmente, decidió que volcar el camión era la mejor alternativa dadas las circunstancias, afirmando que buscó “el mal menor" para evitar una tragedia.
A pesar de la naturaleza peligrosa de la carga, el conductor aseguró que el tanque de butano está equipado con rigurosas medidas de seguridad para prevenir derrames o fisuras en caso de accidentes de esta magnitud. El sistema cuenta con válvulas de seguridad que se activan automáticamente por presión; no obstante, tras el siniestro, los técnicos de la Policía Ecológica verificaron que los niveles de presión se mantenían estables y lejos de cualquier umbral de peligro.
Durante el desarrollo de la maniobra, el chofer confesó que lo único que pasó por su mente fue su familia. El impacto y la tensión del momento le provocaron un estado de shock tal que perdió la noción del tiempo y el espacio durante el rescate. "De hecho yo volví más o menos en mí cuando ya estaba en el hospital", comentó el trabajador, quien recordó haber recibido curaciones en la ambulancia pero mantiene una laguna mental sobre el periodo intermedio del suceso.
Respecto a su estado físico, el hombre sufrió raspones diversos, una quemadura y un corte en el tobillo izquierdo, aunque afortunadamente ninguna de las heridas reviste gravedad. Tras ser atendido por los servicios de emergencia y evaluar los daños, el conductor mostró un profundo alivio por haber salido prácticamente ileso de un escenario que podría haber sido catastrófico. Conmovido por el desenlace, el transportista resumió su fortuna al decir que "el barba estuvo de este lado, por suerte", reconociendo que, pese a los golpes y la pérdida material, lo más importante fue preservar su integridad y la de las personas que se encontraban en las inmediaciones.
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