La Usina Popular y Municipal de Tandil SEM informó que ayer, alrededor de las 9, llevó adelante un nuevo procedimiento para detectar y cortar conexiones eléctricas clandestinas en la toma ubicada en el barrio La Movediza.

El operativo se desarrolló en las calles Navarro y Misiones y sobre Piccirilli, entre las alturas 1000 y 1200, donde personal técnico de la empresa intervino para desmontar instalaciones irregulares conectadas de forma directa a la red.

El procedimiento se realizó con el acompañamiento de tres móviles policiales de la comisaría Segunda, además de dos camiones y una camioneta de la empresa distribuidora de energía eléctrica, garantizando las condiciones de seguridad necesarias para trabajar en el lugar.

En la zona se detectaron múltiples conexiones directas, aéreas y subterráneas, muchas de ellas derivando al interior de la toma a través de “zapatillas” eléctricas y tendidos precarios, lo que representa un “grave riesgo” de electrocución e incendios, tanto para quienes manipulan esas conexiones como para los vecinos del sector.

Además, desde la Usina advirtieron que este tipo de “maniobras ilegales” afectan la calidad del servicio y generan un perjuicio económico para el conjunto de los usuarios regulares.

Desde la Usina de Tandil recordaron que estos procedimientos forman parte de una línea de acciones sostenidas que la empresa viene desarrollando en la toma del barrio La Movediza con el objetivo de “reducir el nivel de riesgo eléctrico, preservar la infraestructura de la red y hacer cumplir la normativa vigente en materia de seguridad y uso del servicio eléctrico”.

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