MANIFESTACIONES
Protestas opositoras en México a poco del inicio de la campaña
Vestidos de blanco y rosa, los detractores del presidente Andrés López Obrador se concentraron en el Zócalo, la plaza principal de la Ciudad de México, en uno de cuyos costados se ubica el Palacio Nacional, sede del gobierno.
“Nuestra democracia no se toca”, se leía en un cartel desplegado en la tarima donde varios dirigentes pronuncian discursos a menos de tres meses de los comicios del 2 de junio.
Recibí las noticias en tu email
La convocatoria fue promovida por media docena de organizaciones civiles que esperaban congregar ciudadanos en más de cien localidades del país y 15 del exterior para denunciar la supuesta intervención ilegal de López Obrador en la campaña.
“Lo que queremos es que el gobierno no interfiera, que el crimen (organizado) no interfiera, que la sociedad pueda decidir libremente y que el árbitro electoral garantice cancha pareja”, dijo a periodistas Marko Cortés, dirigente del conservador Partido Acción Nacional (PAN).
“Las reformas que mandó el presidente (al Congreso) atacan a las instituciones independientes, es necesario venir a defenderlas”, señaló Jorge Reyes, estudiante de 18 años, según la agencia de noticias AFP.
Reyes se refirió a un paquete enmiendas del gobierno que proponen desde un aumento en las pensiones hasta la eliminación de organismos descentralizados.
López Obrador, cuya popularidad supera el 60 por ciento, considera la convocatoria como una “manifestación para defender la corrupción” y pone en duda que a sus organizadores les importe la democracia.
Los convocantes alegan que el gobierno hace propaganda, desvía recursos y utiliza a los beneficiarios de sus vastos programas sociales para favorecer a la candidata presidenciable del oficialismo, Claudia Sheinbaum, quien fuera alcaldesa de Ciudad de México.
La dirigente, de 61 años -que inscribió formalmente su postulación, según reportó el Instituto Nacional Electoral (INE)-, recibe 64 por ciento de las preferencias, según un consolidado de encuestas realizado por la firma Oraculus.
En un lejano segundo lugar, con 31 por ciento de apoyo, se ubica la senadora de origen indígena Xóchitl Gálvez, candidata de una coalición de los sellos tradicionales PAN, Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Partido de la Revolución Democrática (PRD), que se presenta con una agenda de centroderecha. (Télam)