El cuerpo fue devuelto el pasado 9 de noviembre en una entrega coordinada por el Comité Internacional de la Cruz Roja, luego de que el grupo terrorista Hamás informó que fue encontrado en un túnel del campamento de Yebna en Rafah, al sur del enclave palestino.

El teniente Hadar Goldin cayó en combate el 1 de agosto de 2014 durante la Operación Margen Protector; entonces, había sido víctima de un ataque por parte de Hamás en Rafah y luego fue secuestrado.

Durante estos once años, su familia reclamó la devolución del cuerpo para poder despedirlo, remarcó un informe de Newsweek Argentina.

“Su cuerpo fue tomado como rehén por Hamás, que se negó a devolverlo durante todo este tiempo. A lo largo de este período, los gobiernos israelíes hicieron grandes esfuerzos para recuperarlo. Naturalmente, todo esto ha ocurrido en medio del profundo dolor de su familia, que ahora podrá darle un entierro judío”, expresó el primer ministro, Benjamin Netanyahu.

Ayer, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron que a apenas unas horas de la devolución de los restos de Goldin, sus tropas desmantelaron el túnel en el cual fue hallado.

Luego de la restitución e identificación del cuerpo, miles de personas acompañaron a la familia de Hadar Goldin, en una multitudinaria despedida al soldado que fue un símbolo de la lucha por la liberación de los rehenes.

“Enseñanzas para la vida”

“Sinceramente, no puedo explicar cómo lo hicimos, excepto que cada vez que estábamos a punto de quebrarnos, alguien de la familia intervenía y decía: ‘¿Pero qué diría Hadar?’. Estamos aquí gracias a todo lo que nos dejaste, a todas tus enseñanzas para la vida y a quien eres”, expresó su madre, Leah Goldin.

La mujer resaltó a su hijo como “alguien que veía la alegría y la sonrisa como el camino hacia la verdadera conexión humana”.

“Por eso es tan imposible llorar por él. Así que, entre lágrimas, recordemos siempre la radiante sonrisa que representa la verdadera conexión entre las personas”, enfatizó.

Por su parte, Simcha Goldin, padre del soldado caído, remarcó: “Eso es lo que Hadar nos enseñó, y debemos continuar su camino. Cuando se alistó, le pidió a su madre Leah que le enseñara a coser, y él mismo bordó las palabras ‘fuerza y ​​humildad’ en la correa de su rifle”. NA

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