Arsénico en el agua: el Consejo Hídrico Federal desestimó el informe del ITBA
El organismo estableció que “la información remitida por el ITBA carece de trazabilidad verificable".
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La problemática por la presencia de elevados niveles de arsénico en el agua continúa generando debates a nivel nacional. El Consejo Hídrico Federal (COHIFe), en medio de un encuentro realizado en Mendoza que contó con la presencia de representantes de 14 provincias, afirmó que el Mapa de Arsénico que difundió el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) “carece de las condiciones técnicas, científicas, metodológicas y documentales necesarias para ser considerado una herramienta válida”.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl organismo estableció que “la información remitida por el ITBA carece de trazabilidad verificable", afirmando que "toda vez que las muestras fueron aportadas por personas de manera voluntaria, sin registro de cadena de custodia, sin datos sobre las coordenadas exactas, profundidades, tipo de captación, preservantes utilizados, tiempos de transporte, condiciones de conservación, ni controles in situ, contraviniendo lo establecido por la Organización Mundial de la Salud e IRAM, entre otros organismos”.
Representantes de Santa Fe, Entre Ríos, Buenos Aires, La Pampa, San Juan, La Rioja, Corrientes, Chaco, Mendoza, Chubut, Misiones, Salta, Formosa, Córdoba y el Estado Nacional firmaron un documento que quita toda validez a la publicación del ITBA.
El COHIFe manifestó que “una temática de extrema sensibilidad pública y sanitaria, como es la presencia de arsénico en aguas subterráneas y superficiales del territorio nacional" no puede ser difundida con liviandad, ya que "cualquier comunicación en este sentido requiere el más estricto cumplimiento de normas y protocolos técnicos y científicos”.
En esa misma línea, certificaron que el Mapa de Arsénico “presenta muestras correspondientes a localidades que actualmente reciben agua potable de fuentes dentro de los límites establecidos, generando una asociación incorrecta entre valores hallados en aguas subterráneas y el agua efectivamente consumida por la población, induciendo interpretaciones erróneas con potencial impacto sanitario y social”.
“El propio ITBA reconoce que el Mapa se enmarca en un proyecto de extensión universitaria y una tesis de grado, sin revisión por pares, sin protocolos oficiales de muestreo y sin los alcances técnicos necesarios para caracterizaciones regionales de aguas subterráneas, lo cual limita su validez como herramienta concluyente”, concluyeron.
La postura de Obras Sanitarias en Tandil
El mapa del ITBA señaló a Tandil en "luz amarilla" por los niveles de arsénico en el agua, lo que generó preocupación en la comunidad local. El director de Obras Sanitarias, Juan Maciá, enfatizó la seguridad del agua, explicando que el organismo realiza muestreos constantes bajo un plan acordado con la Autoridad del Agua (ADA). Los valores registrados "dan dentro de la Ley 11820, que fija un límite de cincuenta partes por billón", afirmó.
Destacó que los análisis se realizan desde hace dos años con un laboratorio de Mar del Plata, inscripto bajo normas IRAM e ISO. Maciá cuestionó la base del informe del ITBA, señalando una publicación similar de hace un año y la falta de claridad en la fuente de datos. Sospecha que los resultados provengan de pozos privados no registrados ante la ADA, en la zona de La Blanqueada.
El director de Obras Sanitarias lamentó que esos informes, sin aclarar parámetros, generen alarma. Maciá reiteró a los ciudadanos que "el agua de Tandil es apta para consumo, la podemos tomar sin temor".
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