"SHAKIRA"
La mano derecha de Milagro Sala reveló detalles sobre negociados
Mirta “Shakira” Guerrero, la excolaboradora de Milagro Sala, habló sobre sus estrechos vínculos con la líder de la Túpac Amaru, a la que definió como “un monstruo disfrazada de dirigente”.
Lo hizo en una entrevista con Jorge Lanata, en la que describió sus vivencias junto a la líder social que le dejaron un saldo de tres años y tres meses de prisión efectiva producto de un robo al equipo de producción de PPT en 2012.
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También fue condenada a seis años de prisión en la causa conocida como Pibes Villeros, en la que las cámaras del Banco Nación de Jujuy la filmaron retirando por caja, en dos días, unos 30 mil millones de pesos que eran para realizar obras.
Cumplida su condena, la exmilitante se mostró arrepentida de su participación y aseguró haber dejado de creer en Milagro Sala.
“A Milagro la conocí hace 26 años. En aquella época mi hija iba a un jardín y ella solía hacer reuniones a través de ATE. La conocí y empecé a militar, tiempo después se armó la Túpac Amaru y eso me fue sumando. La necesidad que había en aquella época me hizo sumarme”, argumentó Guerrero.
A partir de su participación, describió los mecanismos que utilizaba Sala para aumentar su patrimonio personal: “Cuando trabajas 24/7 con una persona lo ves como algo cotidiano, ves que saca plata de acá y de allá y no te ponés a pensar de dónde la saca. La plata iba directamente a la casa de Milagro Sala, la recibían, la contaban y ella tenía dos placares con doble fondo, donde la guardaba. Era como tener una doble billetera”, confesó.
“Siempre quería más”
Asimismo, reveló que la líder social viajaba con abultadas delegaciones para transportar dinero y rememoró una visita al Papa Francisco en el Vaticano con 16 personas.
“Shakira”, tal y como la apodaron por su larga cabellera, contó que Milagro construía nuevas propiedades porque “nunca pudo conformarse con nada” y que “siempre quería más”. Además, reveló que, luego de las causas por desvíos de fondos y asociación ilícita, Sala intentó justificar las construcciones al vincularlas con un programa para jóvenes con problemas de adicciones.
“No sé el número exacto, pero las casas que ella dice que construyó para pibes con rehabilitación, se las construyó para ella. Estuve al frente de la construcción de la casa y ese verso de que era para gente en rehabilitación es una mentira, salió cuando estaba ya presa. La conocí teniendo una casa y fue avanzando a otra y a otra y planeaba en el Dique otra y nunca se conformó con nada, siempre quería más”, dijo.
Y continuó: “A Milagro Sala le gusta todo lo que sea de primera clase y primeras marcas. Se compraba todo lo que sea de marca, lo llevaba a la textil para que le pusieran el nuevo bordado INCA. De la misma forma los calzados y los jeans. Ella se mostraba en una motito, pero tenía autos y camionetas, y no solo ella, también los hijos. Sus hijos en un año llegaron a comprarse cuatro camionetas Hilux y distintos vehículos. Ella tenía una camioneta durante seis meses y ya estaba vieja, la tenía que cambiar”.
Con respecto a la lógica de poder de la familia al frente de la Túpac Amaru, la excolaboradora señaló a Raúl Noro, marido de Milagro, a quien definió como “un ideólogo en las sombras: El marido puede él decir que no tuvo ningún rol, públicamente no participaba, pero si escuchaba, es como un ideólogo tapado”, apuntó.
Además, Guerrero no dudó en definir a Milagro Sala como una persona “muy violenta” y dejó en claro el poder que mantiene la líder social al asegurar que logró poner en pie “un Estado paralelo” en Jujuy.
“Milagro era violenta, siempre lo fue. Ella saltó toda la vida a favor de los hombres y en contra de las mujeres. A mí me pasó que estuve en su casa y me tiraron una colcha y me empezaron a pegar. Cinco hombres fuertes, grandes y ella mirando. Quería ver si yo resistía golpes. Yo la miraba a ella y se cag… de risa. Imagináte si eso me lo hizo a mí, que dejé a mi familia para trabajar con ella...En ese momento no se podía decidir, no había trabajo”, recordó con lágrimas en los ojos.
La exmilitante de la organización jujeña detectó el quiebre con Milagro Sala en la previa de la sentencia por la causa “Pibes Villeros”, por asociación ilícita, aunque aseguró que “fue tarde”.
“Le dejé de creer tarde. El día del juicio, en la previa a que me den la sentencia la de Pibes Villeros, que tuvo muchos imputados y ahí fui como hilando. Cuando me dieron la domiciliaria, empecé a investigar y ver todo lo que llegó a tener, cómo fue creciendo, de dónde obtenía la plata”, indicó. NA