Un peligroso preso que estaba internado se fugó cuando tres policías se durmieron
El prófugo se encontraba en el hospital internado desde el 11 de febrero. Estaba detenido por un crimen narco. Logró fugarse cuando los tres policías que lo custodiaban se quedaron dormidos. Los agentes fueron desafectados.
Un peligroso delincuente que estaba preso desde febrero último por un homicidio vinculado con el narcotráfico se fugó de un hospital de La Matanza donde permanecía internado esposado de pies y manos luego de que aparentemente los tres policías que lo custodiaban se quedaron dormidos.
Recibí las noticias en tu email
La fuga del detenido, identificado por los investigadores como Nahuel Nicolás Medina (19), se registró a las 3 del viernes en el Hospital Simplemente Evita de la localidad de González Catán, del mencionado partido del oeste del conurbano.
Según las fuentes, Medina en la habitación 108 del primer piso del centro de salud y aprovechó que una mujer policía que estaba de consigna a su cuidado se quedó dormida en una silla a su lado y le robó la llave del candado de las esposas.
Cuando fue interrogada, esta policía no pudo justificar dónde estaba la llave al momento del escape, indicó un vocero.
Siempre según la versión oficial, otro de los policías que estaba junto a ella dentro de la habitación también se quedó dormido, en tanto que otra compañera afectada a la custodia se había retirado a dormir a su auto particular, que estaba estacionado en la puerta.
Debido a la gravedad del hecho, los tres policías quedaron separados de la fuerza por orden del auditor general de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense, Guillermo Berra, quien dispuso desafectarlos del servicio mientras dure la investigación.
Crimen narco
Las fuentes explicaron que Medina estaba internado en el hospital desde el 12 de febrero pasado, cuando fue detenido por un homicidio vinculado con el narcotráfico ocurrido en septiembre de 2018 en el barrio Villa Scasso de González Catán.
Medina está acusado del crimen de un presunto narco y de la tentativa de homicidio de un hermano de éste, indicaron a Télam fuentes de la investigación.
Tras el crimen, la Policía comenzó a buscarlo, pero “Medina es peligroso y maneja muchos recursos porque se dedica a alquilar armas, de manera que se la pasaba cambiando de autos y viviendas y fue difícil hallarlo”, agregó un vocero.
Finalmente, el 12 de febrero último, el sospechoso fue detenido tras un tiroteo con personal del Comando Patrulla Sur de La Matanza y como recibió tres heridas de bala (brazo derecho, pierna izquierda y hombro izquierdo) estaba internado en el hospital con cuatro policías de custodia y esposas en manos y pies debido a su alto grado de peligrosidad.
La investigación
El fiscal de la Unidad Temática de Homicidios Claudio Fornaro, que investigaba a Medina por el homicidio narco y la tentativa, quedó por ahora a cargo de la causa por la fuga y ordenó distintas medidas de prueba, entre ellas las filmaciones de las cámaras de seguridad dentro del centro de salud como de sus alrededores para tratar de establecer cómo ocurrieron los hechos y que se tome declaración a los testigos.
En tanto, Fornaro dará intervención por el hecho a la Fiscalía de Violencia Institucional para que se sume a la pesquisa, ya que aún hay muchas dudas sobre lo sucedido, señaló un investigador.
Otras causas
Además de los hechos que investigan en La Matanza, Medina también está imputado en un expediente por un secuestro extorsivo que tramita el juez federal 2 de Morón, Sebastian Basso.
Según la investigación, Medina -que estaba con dos cómplices ya detenidos- secuestró en Rafael Castillo a una pareja, la mantuvo cautiva durante cuatro horas y pidió 150.000 pesos de rescate a un familiar para liberarla sana y salva.
Y si bien fue mencionado en la causa por el crimen del playero Matías Villavicencio (27), asesinado el pasado Año Nuevo en González Catán, el ahora fugado finalmente no quedó imputado por ese hecho, que tiene otros tres detenidos.
El crimen de Villavicencio ocurrió cerca de las 6.45 del primer día del año cuando el joven regresaba de un boliche en la vecina localidad de Gregorio de Laferrere a bordo de su Volkswagen Vento y se cruzó con cuatro jóvenes que lo balearon.
La investigación estableció que Medina habría mantenido escondidos a los tres sospechosos en un aguantadero en el que almacenaba armas y elementos robados que luego eran robados en el mercado ilegal. (Télam)