Necrológicas
MARIA TERESA USANDIZAGA (“MAITE”)
“Somos muchos… muchos, los que no podríamos imaginar la vida sin ella…
Maité Usandizaga nació en Tandil, el 1° de marzo de 1926.
Rodeada del cariño y cuidado de sus nueve hermanos, numerosos tíos, primos, la abuela Micaela, y bajo la atenta y amorosa mirada de sus padres, Basilio y Lola, tuvo una infancia muy feliz, transcurrida en el campo y el pueblo de Tandil.
Estudió en el colegio de Hermanas de Tandil; y el magisterio en el Santa Unión, en Buenos Aires.
Activa, alegre, trabajadora; tenaz, afectuosa, inquieta, excelente compañera y apoyo de sus hermanos y cuñados; cariñosa, firme y siempre atenta a sus sobrinos. Su presencia entusiasta no pasaba desapercibida, aún cuando ella nunca ocupaba el primer lugar.
Siempre dispuesta a hacer el bien. Su gran temple y generosidad supieron acompañar y aliviar los momentos duros de quienes hemos estado cerca. Y en su espíritu alegre y vivaz encontraba el modo de una interesante y grata compañía, destinada a quien pudiera tener 3, 8, 16, 25, 50 o 90 años!…
Viajera incansable y curiosa, esperábamos ansiosos su regreso que prometía amenos e interesantes relatos, ilustrados con diapositivas, fotos y recuerdos…
¡Caminatas, salidas, pic nics incontables!… Todos hemos aprendido a disfrutar con ella desde los detalles de la preparación hasta la vuelta, repleta de anécdotas, bromas y canciones compartidas luego en animadas reuniones familiares, siempre endulzadas con alguna rica torta salida de sus manos. Así también, nos fue transmitiendo su entrañable amor por la tierra española de sus ancestros.
Este Tandil que la vio crecer, le dio también la oportunidad de brindarse desde muy joven a la comunidad, en diversas actividades e instituciones; la catequesis en Villa Aguirre; la comisión de Damas del Hogar de Niñas y Ancianos; las Rosadas Voluntarias del Hospital; el Pensionado Chapar, fruto de su organización, empuje y dedicación esmerada.
En fin, sin hechos extraordinarios, fue una mujer fuera de lo común, cuya fuerza de voluntad, firmeza en sus convicciones, servicialidad y apertura a lo nuevo, han hecho que su presencia siguiera siendo muy significativa también en las pequeñas-nuevas generaciones; y en las futuras, a las que con gran empeño y entusiasmo dejó escrita una detallada historia familiar.
Cálida, atenta, y acogedora, aún desde la cama en sus últimos días, en compañía de Loly, y en su inmenso corazón, nos siguió convocando como en sus jóvenes años.
(Un rato antes de su partida, una de las sobrinas bisnietas de siete años, salió del colegio y fue a verla, se puso una mesita al lado de su cama y allí hizo los deberes…).
Desde España, un familiar con el que Maité compartió allí temporadas en su juventud, nos envió estas palabras: “A todos nos gustaría que dijeran de nosotros lo que podemos decir de Maité: que hizo felices a los que le rodeaban”.
Por M.B.U., con el cariño de toda la familia”.
Recibí las noticias en tu email
LUISA MELERI DE FANCHI
El miércoles 14 de junio, a los 93 años, falleció Luisa Meleri de Fanchi, causando dolor y tristeza a familiares y amigos.
Había nacido el 4 de febrero de 1924, en Teglio, provincia de Sondrio, Italia.
Junto a Gottardo Fanchi (f), su esposo por más de 50 años, conformó una maravillosa familia. De esa unión nacieron sus dos hijas: Delia (f) y Elvira.
Disfrutó además de la compañía y cariño de sus tres nietas: María José, Luciana y Florencia, y de su hijo político Martín.
Previo velatorio, sus restos fueron inhumados en el cementerio Municipal de Tandil.
Dedicatoria
“Su recuerdo siempre estará presente entre quienes la acompañaron en el trayecto de su vida.
Su familia agradece a los familiares, amigos y vecinos que han estado presentes en el duelo y a aquellos que han hecho llegar sus condolencias”.
MANUELA JOSEFA SORONDO Vda. DE JUAREZ
El 12 de junio, a los cien años, se produjo el fallecimiento de Manuela Josefa Sorondo viuda de Juárez.
Nacida en Olavarría el 17 de diciembre de 1916, luego de contraer matrimonio se trasladó a la ciudad de Tandil con su marido y su hijo mayor, Roque. Luego tuvo a sus hijos Margarita, Roberto y Juan José (f).
Recordatoria
“Fue una gran mujer y cumplió fielmente su rol de esposa, madre y abuela.
Su partida generó mucho dolor a todos sus seres queridos.
Te vamos a extrañar mucho, Abuela querida. Nos quedamos con tus más lindos recuerdos, enseñanzas y tu gran ejemplo de vida, que siempre iluminará nuestro camino.
Gracias por tanto cariño y amor que nos brindaste en estos cien años.
Nunca te olvidaremos.
Tus hijos, nueras, nietos, bisnietos, sobrinos y amigos”.
JUAN CARLOS LASA
El 27 de mayo, a los 64 años, se produjo el fallecimiento del vecino Juan Carlos Lasa.
Había nacido el 28 de mayo 1952 en Tandil, y era hijo Francisco Lasa y Lucía Matilde Hourcade.
Con sus hermanos Alberto y Susana compartió su infancia en el paraje “El Gallo”, en tanto que concurrió a la Escuela 41, en donde cosechó amistades encontrando a su mejor amigo Miguel. Compartieron su vida y pasión por los caballos y domas hasta el día de hoy.
En 1974, conoció al amor de su vida Graciela, contrayendo matrimonio un 31 de octubre y de esa unión nacieron sus hijos Silvana, Eliana, Maximiliano y Florencia. Luego llegarían sus hijos políticos “Quique” (fallecido), Sebastián, Emilse y Santiago.
Durante 27 años trabajó como chofer de larga distancia en la empresa Río Paraná. Su dedicación y compañerismo dejó el fruto de grandes amigos y anécdotas para no olvidar.
En sus últimos años se abocó de lleno a su familia, en especial a su cariño y presencia a sus siete nietos: Lorena, Facundo, Mayra, Milena, Lucrecia, Juana y Tomás.
Dedicatoria
“Tu partida repentina nos dejó sin consuelo, es un dolor que nos va acompañar toda la vida. Fuiste el mejor ejemplo de hombre que una familia puede tener, como esposo, padre, abuelo, amigo…
Siempre codo a codo con tu amor, dándonos lo mejor para nosotros. Ahora, pasando los días, extrañándote inevitablemente, solo nos podemos aferrar a todos los recuerdos que nos dejaste, viejo, tu complicidad, tus consejos, tus anécdotas, tus silencios, el apoyo a cada uno, tu humildad y sobre todo tus ojos, que estamos seguros que ´desde el cielo tus ojos nos guían´.
Gracias papá por todo !o que nos dejaste en nuestro corazón, pero sobre todo en nuestros hijos que -te aseguro- jamás se van a olvidar.
Danos fuerzas para seguir. Te amamos, fuiste inmenso”.
EVA SANCHEZ Vda. DE EMER
Pocos días antes de cumplir 85 años, falleció la vecina Eva Sánchez viuda de Emer, quien había nacido en San Manuel el 23 de junio de 1932.
A los 18 años unió su vida con Ismael Emer y se radicó en Tandil. El amor se vio coronado con la llegada de los hijos Miguel, Néstor y Silvia.
Con el correr de los años la familia se fue agrandando con la llegada de sus nueve nietos: Carla, Yamila, Yasmín, Jonatan, Eliana, Ivana, Soraya, Florencia y Ramiro.
Eva también disfrutó del nacimiento de sus 17 bisnietos: Juan, Juli y Martina, Fermín, Maité y Bastian, Tobías, Pilar y Benicio, Federico y Martina, Simón y Juan, Valentina y Mateo, Santino y Agustina.
Recordatoria
“No encuentro palabras para definir lo feliz que fui a tu lado. Fuiste una gran abuela, la que en las noches de invierno me calentaba la cama antes de dormir y la que al levantarme la calentaba las medias antes de ponérmela… Con esto resumo lo feliz que fue la infancia al lado tuyo y hasta el día en que te fuiste siempre estuviste junto a mí.
Te voy a extrañar toda mi vida y jamás –pero jamás- voy a poder olvidar tan bellos momentos vividos junto a vos.
Te amo!”
Yamila Emer.
GUILLERMO OSCAR CARLONI
A los 65 años, el 18 de junio dejó de existir Guillermo Oscar Carloni.
Nacido en Tandil el 16 de diciembre de 1951, su partida es lamentada por su esposa Patricia Casanovas, sus hijos Guillermina, Paola, Florencia y Franco; sus hijos políticos Eduardo, Martín y Diego; sus nietos Juan Bautista, Delfina, Juana, Juan Pedro, Faustina y Regina; su hermana Diana Carloni y sus sobrinos Mauricio, Luciana y Sofía.
Dedicatoria
“Levantarme, buscarte, querer escucharte… Y solo me quedan tus recuerdos, que por suerte fueron muchos.
No me voy a olvidar más en la cocina de Vigil: todos sentados, me miraste a la cara y dijiste ´¿vos estás embarazada?´. Yo con 19 años y vos en ese momento seguramente con mucha vergüenza; te dije sí…
Imagino el dolor de padre ahora que soy mamá porque nos costó a todos, pero después con ayuda de mamá pudimos -vos a tu manera y yo a la mía- disfrutar al Negro hermoso y te dio el título de papá-abuelo.! Y siempre me decías Batito es Batito! Y sí, tu primer nieto.
Me permitiste trabajar con vos. Con tu forma negativa y pesimista de ´no llegamos ni a las cien líneas este mes´ nos llevó a discutir tantas veces. Pero eras todo para mí y nos aguantamos. Ya después -separado de mamá- hace siete años pasaste a ser mi hijo. Me preocupaba si comías, si tenías todo limpio, si algún domingo comías solo Desde ese momento hasta ahora no te solté la mano…. Te putié, nos peleamos más de cien veces, pero siempre juntos!
Me dijiste ´nunca vas a tener la casa´ y juntos pegamos cada ladrillo. Fuimos los malos de la obra, pensábamos lo mismo y en menos de seis meses me dijiste ´qué casa te hiciste Paola!´.
¿Para qué corrés, para que vas a lo de Yamila si estás gorda?´ Y ahora que había bajado de peso tanto, me decías ´ya te queda feo. ¿Qué vas a hacer de comer?´.
´A mi rugby no me gusta´, pero se te caían las babas viendo jugar a Franco y Tuly….. ¡Qué perros! Y así seguramente más de un papá de rugby te quiere, con esa personalidad negativa pero con un corazón gigante.
Hicimos más de diez viajes a La Plata, de noche, con lluvia, niebla, sol de frente y nunca sentí miedo porque supiste contenerme. Nunca más voy a tener un guía de ruta así. Te extraño papi!
Esa mierda de enfermedad….. Pero te bancaste tantas cosas.
Infinitos recuerdos, charlas, peleas, porque esta familia lamentablemente se alimentaba de eso.
Te siento en todos lados y le pediría a quien sea que me de solo cinco minutos para abrazarte y pedirte perdón porque seguramente me quedó mucho por hacer.
Elegiste mi casa para irte. Elegiste a Martín porque seguramente a mí me iba a lastimar mucho más para que tratara de salvarte.
Gracias amor Martín Ugarte. Estoy orgullosa de lo que hiciste por él, se fue mirándote a vos, en casa con quien más tiempo pasó. Te amo viejo loco, dame fuerzas Dios!.
Gracias infinitas Luján Ugarte y Martín López, porque para ustedes tampoco fue fácil.
Tengo que salir adelante, tenemos con mi familia que salir adelante. Porque estamos destrozados, pero con la conciencia limpia de que siempre estuvimos a tu lado.
Te amamos tu hija, tu yerno, tu princesa, tu Reyna y tu Batito.
Gracias infinitas a Franco Dinunzio, Enzo Caravetta. Barra, Petrucci, Ponce y a una maravillosa persona: Gonzalo Mandiola.
Paola”.
Este contenido no está abierto a comentarios