Robaron armas antiguas del Museo del Fuerte y preocupa que se usen para cometer delitos
El lamentable e inesperado episodio tuvo lugar el sábado, presuntamente en el horario de visitas. La policía investiga el hecho y aunque no se sabe si las armas aún funcionan, igual preocupa su destino final. Es la primera vez que la institución sufre una situación de estas características.

En medio de la algarabía por las vacaciones de invierno y la excelente afluencia de público que ha registrado en estos días el Museo Histórico Fuerte Independencia, el robo de una serie de armas antiguas empañó el escenario actual.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl hecho se produjo el sábado y fue advertido cerca de las 15, cuando personal de la institución registró que una de las vitrinas de la sala 16 estaba rota y había un arma tirada en el piso.
Inmediatamente se dio aviso a la policía y se procedió a tomar las huellas dactilares y hacer las pericias para resolver el caso, que no sólo implica un daño contra el patrimonio histórico del museo, sino que también es un potencial peligro por el uso final que pueden tener.
Al respecto, Oscar Granato, presidente de la Asociación que maneja el Museo, expuso que “el sábado estábamos eufóricos con la cantidad de gente recibida y en el ínterin, cerca de las 15, advertimos este faltante”.
Asimismo, la comisión directiva y los empleados consideran que la sustracción de los elementos se produjo en el horario de visitas, habilitado de 13 a 19, porque las salas tienen alarmas que se activan cuando el espacio está cerrado.
“La persona que fue, es probable que haya advertido que a las 13, cuando se abre todo, se dejan sin efecto las alarmas y se encienden las luces. Tampoco descartamos que hayan estado esperando en el fondo del patio hasta que se abriera al público”, indicó.
Un hecho inesperado
Además, señaló que se encuentran trabajando junto a la policía en el inventario para ver qué armas faltan. “Son antiguas y no sabemos si sirven todavía, pero quizás para intimidar, para venderlas, el que se las llevó ya tendría un fin específico”.
Nunca antes la reconocida entidad había sufrido un episodio de estas características, por ello el robo generó cierta desazón y desconcierto, más si se considera que el ladrón pudo haber accedido al lugar en el flujo de público visitante.
En tanto, las fuerzas de seguridad temen que esas armas no tengan numeración registrada y puedan ser utilizadas para cometer ilícitos, más allá de que estén en condiciones o no de ser disparadas.
Por otro lado, Granato detalló que, si bien existe un sistema de videovigilancia que funciona durante el horario de apertura, admitió que las imágenes no son buenas, por eso no confían en que las cámaras puedan aportar alguna información valiosa.
“Es imposible manejar todo desde un lugar porque el museo es muy grande y la verdad no tenemos un buen equipo, para eso habría que tener un sistema bueno pero no tenemos plata”, sostuvo.
“Estos objetos en particular estaban en las vitrinas en la sala 16, que es la última detrás de los carruajes, entonces la persona ha aprovechado esas circunstancias para cometer el delito”, remarcó.
No obstante este trago amargo, celebró la buena concurrencia de gente, que ha logrado recuperar parte del espíritu de otras épocas tras el parate devenido de la pandemia.
En tal sentido, compartió que, a lo largo del fin de semana se registraron más de 150 personas por día y durante la semana, las salas ubicadas en 4 de abril al 800 recibieron a más de cincuenta visitantes cada día, un ritmo muy esperanzador para la institución.