Sucesos notables en la historia de Tandil
El chico que fue a la guerra - Cap. 3

Cuando con su uniforme gris verde -destinado a los bisoños- el chico de Tandil comía una noche -con “pagnota” de harina negra- el "risotto" del cuartel, hizo su entrada al rancho el soldado encargado de la correspondencia.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailA Eduardo Olivero le brillaron los ojos, porque presentía la existencia de la carta que no tardó en llegar a sus manos.
Si era la letra de su madre. De la noble italiana que había quedado aquí, en La Movediza, llorando de pena y de orgullo por el hijo valiente que había ido a defender su propia tierra.