Construcción en Tandil: el movimiento se mantiene y se diversifica con la inversión en galpones

“Acá en Tandil el movimiento de la construcción se mantiene. No solo se mantiene, sino creo que con respecto del último año ha mejorado, hay movimiento real”, expuso Gustavo Dacovich, constructor y ex presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa  (Apymet).

El empresario dialogó con El Eco de Tandil y brindó un panorama del sector de la construcción en la ciudad. Dio cuenta de que más allá de que la obra pública está paralizada a nivel nacional, se continúa avanzando con contrataciones de años anteriores, expuso que a nivel local existe una diversidad de sectores –desde el agro al desarrollo de software- que promueven el movimiento económico, y señaló además que en el último tiempo crecieron los proyectos para construir galpones a modo de inversión.

"En Tandil, tenemos la suerte de la diversidad económica en la que se pueden generar movimientos, desde lo que es la parte del campo, lo que es la industria, lo que es el turismo, o las empresas tecnológicas. Hay una parte que favorece el movimiento de lo que es la construcción. Desconozco si somos una isla en la cual acá se está trabajando y en otros lugares no. Pero por lo que se lee, a nivel país el movimiento no es como es acá en Tandil”, manifestó el empresario.

Con respecto al presente de la obra pública, Dacovich mencionó que “hay tres alternativas”. Al respecto, precisó, la principal es la Municipal, seguida por la Universidad y la Provincia de Buenos Aires con lo referido al Consejo Escolar y similares. “Eso por ahí está parado, está tranquilo, hay pocas obras. Se están finalizando obras de contratos vigentes del 2022 o antes”, expuso.

Galpones como inversión

Dacovich hizo mención además que pese al freno a la obra pública, en la ciudad creció el movimiento en torno al sector privado. “Tanto en lo que es habitacional, lo que son edificios, que solo dando una vuelta por el centro de Tandil se ven la cantidad de estructuras de hormigón o ya edificios adelantados, ya sean fideicomisos o consorcios constructivos”, planteó.

Pero también hizo referencia a una nueva modalidad de inversión. “En el Parque Industrial se los ve, galpones que se hacen no solo para industrias ya activas, sino para logística o para depósitos”, indicó.

“Han encontrado un nicho fecundo, un nicho que va bien, que tiene actividad, por lo cual para los inversores tienen sentido seguir haciéndolo. Eso es algo que es relativamente reciente, de uno o dos años a esta parte”, precisó.

En el mismo sentido agregó que “había empresas que por ahí no tenían la capacidad o no tienen la capacidad económica o financiera de generar su propia industria, su propio galpón. Y hay inversores privados en el cual generan espacios físicos importantes con una inversión más liviana a lo que es habitacional. Por una cuestión de que es más industrial, es más dinámica la construcción, es más dinámica que los alquileres”. Sumó además que el sector del agro persiste en la inversión inmobiliaria. Hoy hay muchos fideicomisos al costo que están trabajando edificios”.

En sintonía con otros reclamos empresariales, el constructor transmitió la necesidad de contar con “reglas claras”, en particular de parte de las administraciones gubernamentales. “Lo que hemos notado muchas veces es que la toma de decisiones, tanto sea de los deliberantes o de los ejecutivos, es que no se condicen con el común vivir diario del empresario. Acá nadie pide regalos ni nada por el estilo. Lo que pedís, es una regla de juego clara, proyectada en el tiempo y que eso permita saber hacia dónde va tu empresa. Por lo menos en lo que es impositivo, lo que es habilitaciones y documentación”, concluyó.