River acelera el mercado de pases y pone en vidriera a Paulo Díaz, Boselli y Bustos
Tras un año difícil, el club acelera el mercado y evalúa la salida de jugadores que no serán prioridad en 2026.
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El mercado de pases en River comenzó tal como se esperaba: con mucha actividad y con decisiones fuertes después de una temporada considerada nefasta por la dirigencia y el cuerpo técnico. Tras la salida de los seis futbolistas que finalizaron contrato en diciembre, Marcelo Gallardo y la dirigencia avanzaron rápidamente en la búsqueda de refuerzos y activaron gestiones por una lista de candidatos ya definida.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailPero las altas no serán la única novedad del receso. En paralelo, en el club apuntan a resolver la situación de varios jugadores con contrato vigente que no serán prioridad en 2026 y que podrían salir si surge una propuesta convincente. Entre ellos aparecen tres nombres propios: Paulo Díaz, Sebastián Boselli y Fabricio Bustos. Los tres figuran como los próximos en irse.
El mensaje que salió desde Núñez tras el mal año deportivo fue claro: no hay futbolistas intransferibles. Y algunos, como los mencionados, están directamente en “vidriera”, tanto por su presente como por la posibilidad de dejarle una ganancia al club. Además, todos atraviesan un escenario que los convierte en prescindibles: no entran en los planes de Gallardo y también buscan cambiar de aire.
La situación de Paulo Díaz es la más contundente. El chileno, que no fue convocado para los últimos partidos ante Vélez y Racing —una muestra de su falta de consideración—, parece destinado a cerrar su ciclo en el club. Aunque tiene contrato hasta 2027 y una cláusula de 8 millones de dólares netos, en River están dispuestos a escuchar ofertas. En 2024, Al-Qadsiah de Arabia Saudita lo había sondeado con una propuesta importante, pero su baja continuidad y su rendimiento irregular hicieron que no se retomaran los contactos.
Sebastián Boselli, por su parte, regresó desde Estudiantes como una apuesta para la rotación, pero tuvo escasa participación y hoy vuelve a perfilarse para salir. En Núñez no descartan otro préstamo, aunque todo dependerá de las oportunidades que aparezcan en el mercado.
En cuanto a Fabricio Bustos, su salida parece encaminada. La falta de minutos —acentuada con la llegada de Gonzalo Montiel— impulsó al lateral derecho a buscar rodaje en otro club. Brasil aparece como una posibilidad y también volvió a sonar una eventual vuelta a Independiente, aunque por ahora parece poco probable.
Con un plantel en plena reestructuración y con varios movimientos en marcha, River enfrenta un mercado decisivo: sumar refuerzos, ordenar las salidas y encarar un 2026 en el que Gallardo pretende recuperar competitividad después de un año turbulento.