Según el organismo oficial, en términos desestacionalizados la actividad económica avanzó 0,3 por ciento respecto del segundo trimestre del año, lo que marca una moderada recuperación luego de la leve caída registrada entre abril y junio.

Por el lado de la demanda, el mayor impulso interanual provino de la formación bruta de capital fijo, que creció 10,3 por ciento, seguida por las exportaciones, con un aumento del 10,2, mientras que el consumo privado se expandió 5,3 y el consumo público 1,7 por ciento.

No obstante, en la comparación trimestral desestacionalizada, la inversión mostró una caída del 6,0 por ciento, mientras que las exportaciones crecieron 6,4, el consumo privado 0,2 y el consumo público 0,5.

En cuanto a los sectores productivos, se destacaron los fuertes incrementos en intermediación financiera, con una suba del 28,4 por ciento interanual, explotación de minas y canteras, con 10,3, y hoteles y restaurantes, con 7,1. En contraste, la industria manufacturera cayó 2,4 por ciento, la pesca retrocedió 20,2 y la administración pública mostró una baja del 0,6.

Con estos resultados, el PIB acumuló un crecimiento del 5,2 por ciento en los primeros nueve meses del año, según precisó el informe oficial del Indec. NA

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