En diálogo con el programa La Mañana, que se emite por El Eco Streaming, Eco TV y Tandil FM 104.1, Alberto Colonnese, responsable de Clorum Tandil y reconocido por su asesoramiento en mantenimiento de piletas, ofreció una explicación exhaustiva sobre cómo cuidar el agua durante el verano, en especial en un contexto donde muchos barrios enfrentan baja presión y dificultades en el suministro. A partir de consultas de oyentes y de las dudas más frecuentes, detalló los pasos esenciales para mantener la pileta en condiciones, evitar errores comunes y ahorrar agua.

Colonnese explicó que muchas personas se encuentran desorientadas, sobre todo quienes se enfrentan por primera vez al mantenimiento de una pileta. Por eso, brindó una guía completa: desde cómo equilibrar el pH, qué productos aplicar y en qué orden, hasta cómo actuar cuando el agua comienza a ponerse verde. Destacó la importancia de conocer el estado del agua y de aplicar los químicos respetando una secuencia precisa, algo que suele determinar el éxito o el fracaso del tratamiento.

También remarcó que la mayoría de los problemas se generan por la falta de control del pH, una variable clave que incide tanto en la salud de quienes utilizan la pileta como en la eficacia del cloro y otros productos. Por eso, insistió en la necesidad de medir y corregir ese parámetro al menos una vez por semana.

El orden de los productos y el rol central del pH

Colonnese sostuvo que muchas fallas en el mantenimiento se deben a aplicar bien los productos, pero en un orden incorrecto. “Son todos necesarios, pero si no respetás el orden, no aparece el resultado”, señaló. En este punto, explicó que el pH debe corregirse antes que cualquier otro químico, porque un agua alcalina vuelve ineficiente al cloro, al alguicida y al clarificador.

El especialista recordó que el agua de red suele ser dura y tiende naturalmente a subir su pH. A eso se suma que “el cloro tiene un pH 12, así que cada vez que lo agregás lo llevás más arriba”. Cuando esa variable se aleja del nivel neutro (7), aparecen síntomas como irritación en la piel y ojos, resequedad del cabello y, sobre todo, una disminución del rendimiento de los productos.

Por ese motivo, Colonnese recomienda aplicar ácido siempre de noche, después de las 20, utilizando el skimmer y la función de recirculado del filtro para lograr una mezcla eficiente. “En media hora el pH cambia; al otro día ya se puede avanzar con el clarificador”, explicó. Aclaró que excederse en la dosis del clarificador provoca el efecto contrario al deseado, por lo que es importante respetar las cantidades sugeridas.

Además, destacó que si el clarificador actúa correctamente, las partículas en suspensión bajan al fondo y se forman “alfombras” de suciedad que deben retirarse con el barrefondo, preferentemente en modo desagote para no saturar el filtro.

Cómo actuar frente al agua verde y consultas de los oyentes

A partir de una foto enviada por un oyente, Colonnese analizó un caso de agua que comenzaba a tornarse verde y que dejaba un polvillo en el fondo. Según explicó, esa situación suele deberse a un pH desbalanceado más que a una falta de cloro. “Podés tener bien el cloro, pero si el agua está alcalina, una lluvia te la pone verde de un día para el otro”, afirmó.

También respondió consultas sobre piletas pelopincho y recomendó aplicar ácido incluso en ese tipo de estructuras, aunque no deben lavarse con ácido al vaciarlas porque puede dañar las costuras. En cuanto a las pastillas, sugirió una cada diez mil litros y recordó que deben reponerse antes de que se consuman por completo para mantener el volumen de cloro necesario. “Muchos ponen dos pastillas y esperan a que se gasten del todo; así no alcanza”, explicó.

Respecto al uso de cloro líquido, granulado o pastillas, indicó que la elección depende de la rutina del usuario. “Si no te gusta lidiar todos los días, las pastillas son lo ideal. El líquido sirve para refuerzos cuando hay mucha demanda, y el granulado aumenta menos el pH”, detalló.

Los comienzos del especialista y la importancia del asesoramiento

Colonnese también relató cómo llegó a convertirse en referente local del cuidado del agua. Ingeniero aeronáutico de formación, comenzó a interiorizarse en el tema cuando instaló su propia pileta. Con el tiempo, adquirió experiencia, se profesionalizó y, durante la pandemia, inició su propio emprendimiento en la ciudad.

En la actualidad, Clorum cuenta con un local en Av. Avellaneda, donde ofrece insumos y asesoramiento personalizado. “La diferencia pasa por explicar, no por vender. Muchos llegan desorientados y después recomiendan el servicio”, expresó, y destacó el rol de su equipo en la atención diaria.

Además, informó que la comunicación más fluida con los clientes se da a través de WhatsApp, donde comparten recomendaciones, estados con consejos y reciben fotos para análisis de casos particulares.

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