Volver a la tierra: abonos ecológicos a base de materia orgánica, una demanda que escala
En Tandil se generan cerca de 75 mil kilos de restos orgánicos por día. Un grupo de emprendedores ha logrado implementar un circuito de recolección diferenciada obteniendo entre domicilios, comercios y hoteles unos 2000 kilos semanales de deshechos que, junto al saneamiento de establecimientos agrícolas y ganaderos, se transforman en fertilizantes ecológicos.
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Las producciones de cultivos en el mundo se van diversificando y, dentro de ello, existe una inclinación que escala hacia modelos agroecológicos, en busca de mayor sustentabilidad y menor impacto ambiental. Atendiendo esta demanda y la tendencia global, un grupo de emprendedores ha logrado instaurar en Tandil un circuito para transformar residuos en fertilizantes orgánicos, un elemento de uso milenario que resurge con fuerza.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailTambién denominados abonos ecológicos, se trata de productos procedentes de fuentes naturales y contienen, como mínimo, un nutriente esencial para alimentar las plantas, que obtienen una mayor calidad del suelo gracias a la inclusión de materia orgánica.
En este camino, a nivel local este grupo de hacedores recombina técnicas y saberes para desarrollar el máximo beneficio e impactos positivos a la microbiología de los suelos. Sus producciones se colocan principalmente en la ciudad, sin embargo, también han tenido positivas experiencias regionales y hay planificaciones a futuro de expansión.