Con más donaciones que la partida anterior, salió un nuevo camión solidario hacia Goya
Ayer, desde la sede de Apymet, partió a destino la segunda tanda de la campaña “Tandil Solidario”, que fue aún más exitosa que la primera, donde ya se habían cumplido las expectativas.
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Las donaciones salieron desde Irigoyen 850 primero hasta Buenos Aires, donde pasarán esta mañana a otro transporte que finalmente llegará a la ciudad correntina de Goya. Allí, tal como sucedió en la partida anterior, un guía de pesca recibirá las mercaderías y junto a su equipo lo distribuirán en lancha campo adentro.
Según contó Celeste de Araujo, una de las coordinadoras, esta vez se acercó mucha más gente, por lo que la colecta fue ampliamente mayor. De esta manera el furgón de Transporte Gracía, que se acopló a la movida solidaria, viajó anoche con unas 500 bolsas de consorcio llenas de ropa para niños, mujeres y hombres, con ropa de cama, toallas, calzados, bidones de agua y más de 14 colchones. La carga comenzó a hacerse a la mañana temprano para evitar el calor previsto y poder terminar antes del mediodía.
El grupo de amigos que tomó la iniciativa se mostró orgulloso del alcance de la cruzada y de todo lo recaudado. Toda la ayuda llegará a lugares totalmente anegados por el agua, por lo que será distribuida en lanchas.
Con este, se completan los dos viajes estipulados para ayudar a los inundados de esa ciudad costera.
Cadena de favores
El empuje para llevar a cabo la propuesta “Tandil Solidaria” salió de un grupo de amigos, un domingo con asado de por medio. Se pusieron en campaña, se organizaron y consiguieron que la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas de Tandil (Apymet) les cediera el espacio para recibir las donaciones.
Decidieron que el destino sería Goya porque tenían a este guía de pesca conocido, que no dudó en ponerse a disposición para lograr que lo recolectado llegue a los que más lo necesitan. Para esto, reunió gente con ganas de ayudar y formaron un equipo de gente que repartiría los bolsones navegando, para llegar a los lugares totalmente anegados.
Según contó de Araujo, lo más difícil era costear el viaje, ya que los valores averiguados rondaban entre los 40 y 50 mil pesos, lo que resultaba imposible para este grupo de colaboradores. “Teníamos todas las herramientas para ir buscando que la gente nos done, pero no contábamos con el viaje”, contó. Sin embargo consiguieron que la empresa de transporte Expreso García ofrezca voluntariamente su servicio para acercar todas las donaciones hasta Buenos Aires.