Ola delictiva en el barrio Las Ranas
Los vecinos denuncian que los robos se dan a diario, a cualquier horario, sin importar si la casa se encuentra ocupada o no. Aseguran que el accionar policial es escaso, y que en la mayoría de los casos llegan varios minutos después del llamado de emergencia.
Desde hace meses que los vecinos del barrio Las Ranas, más específicamente los que habitan las manzanas ubicadas entre las calles 11 de Septiembre, Moreno, Las Heras y Marconi, vienen siendo víctimas de incontables hechos delictivos que se dan a toda hora, tanto cuando se encuentran en las viviendas, como cuando están ausentes.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailAl parecer, los malhechores, en un repudiable accionar, envían a menores de edad a levantar las térmicas de los hogares, para facilitar las entraderas y tomar desprevenidas a las familias, que ya no saben qué hacer para solucionar este problema. El modus operandi suele ser el mismo y los protagonistas también, aunque la policía no ha logrado identificarlos, ni mucho menos detenerlos.
María, una de las damnificadas, dialogó con El Eco Multimedios, narrando algunos de los hechos que han ocurrido en la zona y poniendo en evidencia la incapacidad de los uniformados para hacer algo respecto.
“Lamentablemente se están dando mucho robos en esta zona. Anoche, en calle Roca han robado una moto, acá en Garibaldi al 1500; nos bajan las térmicas y entran, que no sabemos por dónde porque tenemos rejas, pero entran igual. En mi domicilio entraron, y lo único que se pudieron llevar, porque la moto no la pudieron sacar por el paredón alto, fue el celular de mi hija. Se hizo la denuncia, pero no pasa nada, seguimos en constante peligro”, señaló.
Indicó que desde marzo sufren la inseguridad en carne propia, los delitos con robos que se dan a diario. Crearon un grupo de vecinos por whatsapp y ahí se van notificando de cada uno de ellos, por lo que tiene conocimiento de que la ola delictiva avanza por gran parte del barrio.
Aseguró que los que bajan las térmicas para que los vecinos se queden sin luz son dos niños de entre 10 y 11 años, que lo hacen entre la 1 y las 4 de la mañana, y luego los delincuentes que ingresan aprovechando esta situación tienen alrededor de 20 años.
“Suceden así, haya gente o no. Yo por ejemplo cuando me robaron estaba en mi casa, mi hija estaba durmiendo, le abrió la puerta de la pieza, ella se levantó, lo corrió, y el tipo saltó el paredón con una agilidad bárbara y por suerte, no se pudo llevar la moto”.
Según lo relatado por María, los policías lo encontraron, lo detuvieron y más tarde fue liberado debido a que no tenía ninguna pertenencia ajena en su poder. “Lo que pasa es que ingresa uno, y quedan dos en cada esquina, se pasan lo robado y el que entró sale caminando como si nada”, explicó.
Desprotegidos
La vecina afirmó que se ve la patrulla sólo cuando paran en una casa de comidas para bajar a comprar algo para comer. La barriada ha exigido mayor presencia, que circulen al menos dos o tres veces en el día, pero han hecho oídos sordos a su petición.
“Una vecina me comentó que a la noche vio cómo un tipo se metió adentro de un auto estacionado, todo vestido de negro con una mochila, llamó a la policía y tardó una hora y media el móvil para venir, lógicamente el ladrón no estaba más”, narró, evidenciando el ineficiente papel de los efectivos.
Contó también que otro día, ella misma vio que un auto con vidrios polarizados estuvo parado cerca de dos horas enfrente de su casa, por lo que llamó a la comisaria, el móvil acudió después de media hora, le pidieron los datos al conductor, y a pesar de que no tenía la documentación obligatoria, lo dejaron en libertad, “después a los pocos días fue el que chocó a varios autos en Rodríguez”, refirió.
“El problema que tenemos los vecinos es que en Garibaldi queda muy oscura la calle por la cantidad de plantas que hay, y ahí aprovechan a espiar. Desde Espacios Verdes me contestaron que ellos no pueden venir a cortarlas porque cruzan los cables, entonces tiene que intervenir la Usina, y al final nadie nos soluciona nada”, expresó.
Por último, refirió que según las palabras del Intendente, Tandil es una ciudad segura, pero que “eso debe ser donde vive él, porque acá no lo es. El barrio de Las Ranas es tierra de nadie”.