“Que la gente se entere lo que está pasando en el Centro de Jubilados”
Convocatoria y denuncias en el Centro Tandilense de Jubilados de 4 de Abril al 900.

Un grupo de socios del Centro Tandilense de Jubilados y Pensionados se convocó para hacer público lo que definieron como una “situación crítica” con el actual presidente de la institución.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailExpulsiones sin motivo, cese arbitrario de actividades, falta de respuestas y hasta la presencia policial para obligar a un integrante a retirarse fueron algunas de las denuncias que plantearon.
A las puertas de la sede ubicada en 4 de Abril al 900, más de 20 asociados se dieron cita para dar a conocer la realidad que atraviesan, según contaron, por lo menos desde principio de año.
“Es una situación bastante crítica en el Centro de Jubilados. No nos quiere atender el presidente. Hemos mandado cartas documento, hemos hecho todo lo que se puede. Pero el señor presidente, cuando a él no le gusta hablar con las personas, que somos nosotros los socios, toma actitudes como no dar bolilla, pegar media vuelta e irse, prepotear. Es una manera que tiene de manejarse”, sostuvo Aldo en referencia a René Cabrera, presidente del Centro.
“Ayer a la tarde tenía que venir a bailar la gente de folklore y no les abrió la puerta, ni a ellos ni a la gente de tejo, ni a la gente de las cartas. El Centro estuvo cerrado por disposición del señor. Esto se debe a los asociados, son los que pagan la cuota y los que queremos estar. Que se presente y que dé la cara”, agregó.
Por su parte fueron Mabel y Dora quienes hicieron un repaso de los hechos que desencadenaron en la protesta. De acuerdo a lo relatado, fue a fines del año pasado cuando el actual presidente les planteó que iba a renunciar a su cargo. Por lo tanto algunos socios conformaron un grupo con la intención de postularse para encabezar la Comisión Directiva. Incluso señalaron que el mismo Cabrera estuvo de acuerdo.
Habían acordado una segunda instancia de encuentro que no se llevó a cabo porque “en el medio él citó a una asamblea extraordinaria para formar una comisión de fideicomiso. Nosotros no estábamos interiorizados en lo que significaba eso y le pedimos que nos dijera. Siempre nos manejamos por escrito”, señalaron. A las notas elevadas les respondió que éstas tenían “malas intenciones”, según precisaron. “A partir de ahí la situación fue muy complicada, y ya no nos podíamos comunicar casi por notas”.
Expulsados sin motivo
Los jubilados contaron que algunos de los integrantes del grupo se encontraban en calidad de “expulsados”, desde enero pasado. “Primero fuimos dos, con argumentos de falta de respeto. Después fuimos 4, y ahora somos 8”, indicó Dora.
“Los que estamos hablando estamos expulsados. Al día de hoy el presidente no se dignó a sentarse ni antes ni después de decirnos que estábamos expulsados, para saber nosotros el motivo por el cual nos expulsó. El acta de asamblea a partir de la cual fuimos expulsados, es vergonzosa. No especifica nada de cada uno”, agregó Mabel.
Debido a la expulsión, los jubilados afectados no pueden realizar las actividades que practican en el Centro, como el taller de Folklore, tejo, o jugar a las cartas.
“Nos afecta en folklore, no podemos realizar nada de lo que hacemos en el Centro de Jubilados. Porque el señor Cabrera, estando en una asamblea nosotros expusimos nuestras ideas, y a él le molesta que le pregunten. Le puedo asegurar que las preguntas fueron hechas con todo respeto, y siempre basándonos en el estatuto. No hicimos nada que no sea estatutario. Pero según él nosotros le faltamos el respeto”, señaló Dora.
Por su parte Miguel contó que él es uno de los socios expulsados, e incluso estando una vez jugando al tejo dentro de la institución, se presentaron 5 agentes de policía para pedirle que se retire del lugar. “Fui a la comisaría y no hay acta, denuncia, nada”, agregó el socio.
Pese a la presencia del grupo en el Centro de Jubilados, hasta casi el mediodía de ayer, el presidente no se había presentado para recibirlos y escucharlos.