Se realizó en Tandil el primer censo nacional de personas internadas por motivos de salud mental
El relevamiento se hizo en dos instituciones privadas de la ciudad. El modelo que propone la Ley de Salud Mental apunta a desterrar la internación prolongada de los pacientes como respuesta privilegiada y abordar el tratamiento desde una perspectiva sociocomunitaria. El tandilense Luciano Grasso, director nacional de Salud Mental, explicó que el censo servirá para elaborar un diagnostico que permita avanzar en el cumplimiento efectivo de la legislación.
La semana pasada se llevó adelante en Tandil el censo nacional de personas internadas por motivos de salud mental en instituciones especializadas. La Dirección nacional de Salud Mental, que encabeza el tandilense Luciano Grasso, realizó dicho censo junto a un equipo de voluntarios residentes de las carreras de Psicología y Trabajo Social, coordinados por Juliana Garate por parte de la cartera nacional.
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Esta iniciativa, que se viene realizando a lo largo y ancho del país, tiene por objetivo identificar a la población internada y sus condiciones en el marco del cumplimiento de la ley nacional de Salud Mental (26.657). De esta manera, cada establecimiento podrá, a partir de los resultados del censo diseñar políticas y acciones tendientes a los procesos de externación. En la ciudad, al no existir instituciones públicas monovalentes se ejecutó el relevamiento en las dos instituciones privadas existentes. Las internaciones de salud mental en el Sistema Integrado de Salud Pública se hacen en una sala que depende del Hospital Santamarina, además se brindan tratamientos ambulatorios y atención en el Centro de Día “Tita Brivio”.
En conversación con El Eco Multimedios, el profesional de la psicología y exconcejal oficialista relató que la tarea censal se está desarrollando desde hace varios meses en casi todo el territorio argentino, excepto en tres provincias, que son las más avanzadas en el proceso de desmanicomialziación y ya no cuentan con instituciones de encierro por motivos de salud mental: Santa Cruz, Tierra del Fuego y Formosa.
“Es una tarea muy importante porque da cumplimiento a una ley nacional que indica la realización de censos cada dos años, sin embargo desde que se sancionó la legislación en el año 2010 no se había hecho ninguno”, informó.
Por otro lado, la actividad contribuye a tener un diagnóstico situacional para avanzar en lo que plantea la legislación. La Ley de Salud Mental prescribe que las personas que viven en hospitales psiquiátricos deben externarse y se les debe garantizar un tratamiento en la comunidad. Para eso es necesario contar con información sistematizada. Hasta ahora había datos estimados en cuanto a camas habilitadas en el área, que contabiliza 20000 camas y es el número que habitualmente se esgrime para hablar de personas internadas.
Según Grasso, si bien el censo todavía no terminó arroja una cifra sensiblemente menor: “Habla de los avances en los procesos de externación, pero sigue siendo un número muy significativo y deben profundizarse cambios en las provincias en cuanto a los modelos de abordaje, para poder garantizar que esas personas no sigan viviendo internadas y tengan su tratamiento ambulatorio”.
El cumplimiento de la Ley de Salud Mental
Los datos oficiales señalan que el promedio de permanencia en instituciones psiquiátricas ronda los ocho años, lo que demuestra que más allá de los cambios todavía la internación sigue siendo la respuesta privilegiada en los tratamientos de esta índole.
El funcionario nacional expuso que se tienen que crear los dispositivos alternativos para que la internación como respuesta a los padecimientos mentales severos, deje de ser la moneda corriente y desterrar la idea de que una persona con un padecimiento mental tiene que estar internada mucho tiempo.
El cambio se logra a través de la creación de casas de medio cambio, la inclusión laboral, los centros de día y los abordajes en los centros comunitarios, para lo que capacitan a los profesionales competentes.
“Creamos equipos de abordaje psicosocial en el primer nivel de atención en ocho provincias, garantizando que en los hospitales generales se interne cuando alguien tiene una crisis. En Tandil hay un modelo de abordaje integral, pero en la mayoría de los lugares donde hay hospitales psiquiátricos se los deriva directamente y no se los atiende en el general”, explicó.
Mas del 80 por ciento del presupuesto de Salud Mental a nivel nacional está puesto en los hospitales de psiquiatría; y más del 80 por ciento de las camas de internación por motivos de salud mental se contabilizan allí. Estos números evidencian la alta incidencia del modelo de internación que aún persiste en el modo de entender y tratar a los pacientes con padecimientos psiquiátricos.
“Los consensos internacionales, nuestra ley de salud mental, potencia, otras cosas: el trabajo con las familias, las redes de contención y el cuidado alternativo a la internación prolongada. Hay que cerrar la lógica de internación prolongada y reconvertir esos espacios para ofrecer otra alternativa de salud mental, acorde a la normativa vigente y a lo que estipulan los acuerdos internacionales de derechos humanos y salud mental”, sentenció Grasso.