Vecinos del Barrio 25 de Mayo acusan abandono y un nulo control en la plaza barrial
La plaza ubicada al frente de la Iglesia de San Cayetano se convirtió en tierra de nadie. La falta de mantenimiento dejó como consecuencias mugre, juegos rotos y un espacio poco habitable para los niños. De noche se convierte en un lugar de juntada, donde muchos chicos hacen ruido con sus motos y rompen botellas de bebidas alcohólicas.

Los vecinos del Barrio 25 de Mayo vuelven a pedir por la Plaza Ejército Argentino. En una lucha de larga data, un grupo de frentistas que habitan en las inmediaciones del espacio verde realizaron un nuevo reclamo ante el estado de descuido que se encuentra actualmente. La ausencia de cestos de basura, los juegos en mal estado y la nocturnidad, son algunos de los problemas frecuentes.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailLa plaza ocupa una media manzana, se encuentra comprendida entre las calles San Francisco, Independencia y Basilico. Mientras que del costado restante limita con el Centro de Salud barrial y las Escuelas 504 y 59. En la actualidad, cuentan los vecinos, se encuentra en un estado de abandono total.
“Hay mucha cantidad de botellas. Esto a la noche es una juntada, es un antro. Hay botellas de cervezas, de bebida blanca rotas, de gaseosas y tetra bricks. La policía tendría que pasar a la noche por las plazas, esta plaza es oscura, tenés una arboleda bastante frondosa que tapa la iluminación”, aseguraron.
Debajo de esos árboles, aprovechando la sombra durante el día o una mayor oscuridad por la noche, ahí es donde se juntan los jóvenes. A las botellas en cuestión también se le suman en algunas oportunidades, según contaron, preservativos. Vale destacar que la plaza está iluminada pero en el playón de cemento, donde hay canchas de básquet y fútbol, en el otro sector la frondosidad de los árboles presente otorga oscuridad.
Algunos de los denunciantes incluso han comentado a este medio que el pedido se viene realizando desde los tiempos en que Luciano Jaureguiber estaba al frente del área de Parques y Paseos del Municipio. “Hace rato que mando por el estado de la plaza, me ocupo y me preocupo. Tengo nietos chicos y los llevo a jugar a ahí”, contó Viviana, una de las vecinas interesadas en dar a conocer el estado de situación.
“Con respecto a los juegos, estoy cansadísima de llamar por diferentes problemas. A veces lo solucionan rápido y a veces pasa el tiempo y no. Ahora están los sube y baja tirados, el otro día estaban los trepadores con toda la parte de la malla metálica desoldada, que era un peligro. Un juego desoldado es un peligro”, señaló la frentista.
Peligrosidad en aumento
Las juntadas de los chicos que anda en moto generan un contexto de inseguridad que los vecinos afrontan día a día y al cual la policía no acciona para controlarlo. El relato de una vecina expuso una situación que le tocó vivir una tarde cuando estaba con su nieta en los juegos.
“Estaba con mi nieta de cinco años y aparecen dos motos a todo lo que da, pasaron al lado mío a unos 80 centímetros. Mi nieta se agarró de mis piernas y otra nena salió corriendo despavorida para el lado de los padres. Les digo que no pueden entrar así y arrancaron con improperios, ‘me vas a prohibir entrar vos a la plaza’ me dijo y yo le dije que no, pero que no puede entrar con la moto a esa velocidad, bajate y entrá con la moto caminando”, relató
Luego continuó: “Me dijeron de todo y me amenazaron con que me iban a buscar y me iban a hacer boleta. Cuando saco el teléfono para llamar a la policía salieron disparados con las motos. Ahí medio que me quedé y pensé si me tenía que haber quedado callada porque me podrían haber pasado con la moto por arriba. Quedé en shock”.
Consultada por el accionar de la policía, donde la comisaría Cuarta está a menos de 200 metros de la plaza en cuestión, señaló que “abarcan un tramo muy grande de Tandil y capaz que tienen cuatro autos y la mitad en el taller. Uno a veces habla de la policía y no sé si ellos están en condiciones de abarcar semejante zona”.
Otro vecino coincidió con el desmadre que se genera a partir de la circulación de las motos dentro de la plaza donde indicó que “cuando empieza a bajar un poco el sol, es increíble ver la cantidad de motos que hacen willys, destrezas adentro de la plaza. Si algún nene quiso quedarse un rato más se tiene que ir porque es un peligro”.
Los vecinos están cansados de todo el contexto que se genera en la plaza a partir de cada atardecer. Hasta hicieron llegar las quejas a los oídos de los concejales Luján Fiego y Federico Sánchez Choppa, pero a la hora de hacer la denuncia pertinente sostienen que “no llaman a la policía porque no pasa nada, nadie se hace cargo”.