Salas y las ecuaciones
:format(webp):quality(40)/https://cdn.eleco.com.ar/media/2025/05/boca.jpg)
Sin temor a equivocarme puedo afirmar que ni los más memoriosos del fútbol pueden recordar al instante el nombre de Jorge Rodolfo Salas.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailLlegó a Boca proveniente de Newell´s en 1976. Rubio, puntero, clásico wing con desborde. Le tocó ser suplente de dos leyendas xeneixes: el Eber Mastrángelo y Darío Felman. O sea, jugó poco. Algo así como un año y medio en Boca. Metió tres goles. Uno de ellos inolvidable. Para mí. Solo para mí.
La matemática nunca fue mi fuerte, pero tampoco un obstáculo. No era, ni soy, lo que se denomina un dotado para los números, pero supe tener mis momentos de inspiración. Sobre todo, en mi lejana infancia cuando le agarré la mano a las tablas de multiplicación y me transformé en un loro, repitiendo cinco por ocho cuarenta, nueve por siete sesentaytres, cuatro por cuatro dieciséis...
