Protestas y ataques
Lula acusó al “agronegocio malintencionado” por el intento de golpe de Estado en Brasil
Luego del ataque golpista a las sedes de los tres poderes de Brasil del 8 de enero, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva acusó a sectores del “agronegocio malintencionado” de estar detrás de las protestas, cuyo financiamiento está siendo investigado
Pese a que el grueso del sector necesita estabilidad política y económica para desarrollarse, según dijeron analistas a Télam, que ven en el nuevo gobierno un generador de esas condiciones.
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“Mucha de la gente que estaba en Brasilia hoy quizás sean garimpeiros (extractores de minerales) y madereros ilegales (...) El agronegocio malintencionado, que quiere usar agrotóxicos sin ningún respeto por la salud humana, posiblemente también estaba”, dijo Lula luego de los ataques.
Si bien las responsabilidades sobre las protestas son parte de las investigaciones en curso, incluida la de políticos y fuerzas de seguridad, y los apoyos del agro al expresidente Jair Bolsonaro fueron públicos, -por ejemplo, Confederación Nacional de la Agricultura lo respaldó para buscar la reelección-, analistas coinciden en que es necesario delimitar más los grupos “radicales” dentro del sector.
El economista brasileño Gustavo Souto de Noronha dijo a Télam que en Brasilia estuvieron “los herederos de las viejas oligarquías, las élites tradicionales cuyo poder está ligado a la propiedad de la tierra. No son los sectores que hicieron avanzar el desarrollo capitalista en el campo”.
Comentó que “muchos de ellos son deudores del fisco nacional”, empresarios que aparecen en el registro de “deuda federal activa”, que comprende las deudas tributarias y no tributarias, o de bancos públicos, y por eso “temen que se les cobren sus deudas”.
Dos meses antes de la elección, el diario Folha de São Paulo publicó que dos empresarios del agro incluidos en dicho registro de deudores donaron dinero para la reelección de Bolsonaro. Las donaciones fueron a título personal porque las de empresas están prohibidas.
Para el analista político y económico Miguel Daoud, especialista en temas agrícolas, “existen varios sectores empresarios que no aceptan la victoria de Lula” y, entre ellos, “hay radicales que cometieron ese acto de terrorismo” en Brasilia. (Télam)