No se queje si no se queja
Una vecina de la ciudad, Emilce María, que habitualmente lleva a sus hijos a jugar al Parque Soñado de los Niños, se manifestó muy preocupada por el estado de deterioro de los juegos.
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“No solamente se mueven porque las estructuras ya no están firmes, sino que además están rotos y nadie los arregla”, contó en un mensaje enviado a este Diario. Tal como revelan las fotos que envió y su descripción, los plásticos se encuentran rotos y hay agujeros en las escaleras. “Es un peligro porque se pueden cortar y caer”, indicó, asegurando que justamente una de las imágenes corresponde a la parte alta de una de las torres.
Por otro lado, agregó que también las hamacas están en mal estado, algunas con la base suelta hace tiempo, y los tubos toboganes en muchas partes también rajados resultando inseguros.