Una entradera en una vivienda terminó con un par de delincuentes detenidos
Para la familia Peña-Juárez el de ayer no fue un sábado más. Todo lo que los medios capitalinos informan a diario en materia de inseguridad, lo vivieron en carne propia. La jornada comenzó con la rutina de casi siempre. Desayuno, el hombre de la casa acomodando las cosas en el maletín para ir a trabajar hasta el mediodía, encender el auto, mientras la mujer le abría el portón, para sacar el auto.
Recibí las noticias en tu email
Pero lamentablemente tuvieron una desagradable sorpresa, porque al comenzar a abrirse una hoja del portón del domicilio de Constitución 1047, un delincuente armado amenazó a la mujer y la hizo retroceder. Una vez dentro de la propiedad y con extrema violencia verbal, pensó que tenía controlada la situación sin saber que minutos después pasaría a ser, junto a su cómplice, uno más en la superpoblación de delincuentes que moran en los calabozos de la comisaría Primera.
Los damnificados, Mabel Peña y Julio Alvarez, recibieron a El Eco de Tandil para contar como se dio la entradera que sufrieron. La mujer sostuvo que “todo esto comenzó 8.30 cuando fui a abrir el portón como todas las mañanas. Apenas se abrió una hoja de inmediato el delincuente se metió. Era uno solo, me empujó, me apuntó y tenía su cara descubierta”.
Continuó narrando que “mientras retrocedía le dije ‘nunca pensé que me iba a pasar a mí esto’ y a los gritos me pidió que no hablara. Mi esposo estaba en el auto a punto de irse, pero esta persona le abrió la puerta y amenazándolo con un arma le exigió que se bajara. De inmediato nos hizo sentar a los dos en un banco, mientras le pedíamos que no nos hiciera nada que le íbamos a dar lo que teníamos”.
Acto seguido y tras tener al matrimonio dominado, el delincuente realizó un llamado con su celular y convocó a un cómplice que estaba aguardando en el exterior y se acercó hasta la propiedad en un automóvil Volkswagen Gol Trend, patente colocada JGF 485.
Una de las víctimas relató que “siempre apuntando con su arma de fuego este individuo me dijo que tenía que abrirle a su cómplice, así que acompañado por él fuimos hasta el portón y esta persona ingresó”.
Entrega
El dúo de delincuentes buscaba el dinero de una operación que se iba a realizar con la venta de un auto importado, transacción comercial que estaba prevista pero que finalmente no se concretó.
El matrimonio señaló que “con los dos delincuentes dentro de la propiedad nos hicieron entrar a la casa”. Mientras uno se quedó vigilando al hombre, el otro recorrió y revolvió cajones en busca de dinero.
Fue en ese momento que el malviviente que estaba junto a Juárez le indicó que “ustedes fueron entregados por la venta del auto que van a hacer”, dato que tenía cierta realidad pero que no es actual ya que la operación que finalmente no se llevó a cabo se iba a realizar tres meses atrás.
En cuanto a lo robado señalaron que “le dimos 16 mil pesos y se llevaron el teléfono de mi esposo, nos pedían más pero le dijimos que el auto no se había vendido”.
Policía
Mientras todo esto se desarrollaba, en una de las habitaciones de la casa se encontraba una de las hijas del matrimonio, que al sentir los gritos se fijó lo que estaba pasando por el circuito de cámaras de seguridad, por lo que de inmediato convocó a la policía. Hasta esa dirección llegaron un total de cinco móviles.
“Cuando salieron de la habitación matrimonial vieron la pieza cerrada de mi hija, abrieron y se la encontraron. A los gritos le preguntaron si había llamado a la policía y les contestó que no. Al salir hacia el comedor vieron la pantalla y se dieron cuenta de que estaban siendo filmados por lo que me pidieron la grabación. Cuando se acercaron a quitar el disco, vieron la cantidad de patrulleros que había afuera por lo que huyeron para el fondo de la casa. Uno alcanzó a subirse por los techos y se fue y el restante no pudo y se escondió en el quincho, donde la policía lo agarró”.
Aseveraron que “esta gente nos estaba esperando, no fue algo que sucedió al voleo”.
En cuanto a la segunda detención expresaron que “la policía tras ver las imágenes para constatar cómo estaba vestido el delincuente, lo salieron a buscar y lo encontraron tomando un café en la estación de servicios de avenida Avellaneda y avenida Santamarina. Las cámaras ayudaron muchísimo porque se ve bien la cara”.
Afirmaron que “hay que destacar el trabajo realizado por la policía que fue un lujo, un verdadero espectáculo cómo enseguida vinieron y pudieron detener a esta gente”.
Detenidos
Según detalló la policía, los delincuentes detenidos fueron identificados como Diego Jawniuk de 22 años de edad, con residencia en la localidad de Longchamps. El restante se trata de Víctor Fabián Cufré de 30 años, con domicilio en la ciudad de Buenos Aires quien posee antecedentes penales.
Tras las detenciones, la policía logró secuestrar el dinero sustraído, teléfono celular y prendas de vestir de los ladrones. También, la policía incautó un automóvil Volkswagen Gol Trend, patente colocada JGF485, en el que movilizaban.
Tomó intervención en el hecho la UFI 3 a cargo del doctor Luis Piotti.
Este contenido no está abierto a comentarios