En el corazón de la ciudad, en Mitre 582, se encuentra un proyecto gastronómico que transformó el paladar local y se consolidó como un verdadero referente de calidad y tradición: Pizzas del Tano.
Fundado por Francisco y Santiago, amigos desde los 16 años y compañeros de escuela, este emprendimiento celebra pronto sus cinco años de trayectoria, marcando un camino de crecimiento sostenido y un estilo de pizza distinto que ya es un sello en Tandil.

Lo que nació como un pequeño proyecto en el patio de una casa se convirtió en un espacio con identidad propia. Aunque sus creadores estudiaron carreras ajenas a la gastronomía, aprendieron desde cero, impulsados por una pasión que los llevó incluso a participar en un torneo sudamericano de pizza realizado en la Sociedad Rural de Buenos Aires.

El secreto de Pizzas del Tano está en su estilo napolitano, el primero que surgió en Italia. “Nosotros hacemos masas de más de 24 horas. Nunca la pizza que van a comer está hecha en el día, ya viene con un trabajo anterior que puede llevar uno o dos días”, contaron en diálogo con El Eco Multimedios.

Ese proceso cuidadoso se complementa con materias primas de primera calidad, desde el tomate y la mozzarella hasta los fiambres, aprovechando la excelencia de los productos locales. Francisco y Santiago aseguran que su propuesta no es ni mejor ni peor, sino diferente, una alternativa que ha sabido conquistar a quienes estaban acostumbrados a estilos más porteños.

El local ofrece mucho más que una buena pizza: propone una experiencia. La estética, creada por los propios dueños, combina aires italianos y argentinos, con un claro guiño al fútbol y a Maradona. Fotos del Diego, camisetas y referencias a Nápoles evocan los bodegones porteños y el espíritu napolitano, logrando un ambiente cálido y auténtico.

Ese compromiso con la calidad y el detalle ha rendido frutos. Pizzas del Tano cuenta con una clientela fiel y calificaciones destacadas en Google, además de haber recibido la recomendación anual de la plataforma Gurú, basada en las reseñas del público.

Aunque disfrutan innovando con sabores de temporada, hay clásicos que nunca faltan. La Margarita, “la clásica infaltable, campeona”, sigue siendo la favorita. Para los que buscan algo diferente, está La Tana, una creación propia con base de cuatro quesos, un toque de miel y lomito ahumado. La carta combina creatividad y tradición, con opciones como la fugazza o la especial argentina, pensadas para todos los gustos.

Francisco y Santiago se definen como el “yin y el yang”, complementándose entre la experiencia pizzera de uno y la gestión del otro. Pero ambos coinciden en que el verdadero secreto está en su equipo de trabajo, al que consideran fundamental para seguir siendo una de las pizzerías más elegidas de Tandil.

Con el verano en puertas, la propuesta se disfruta aún más: el local, pleno centro, ofrece mesas al aire libre para acompañar las pizzas con una cervecita en la mejor época del año.

Si todavía no conocés este proyecto que revolucionó la pizza en la ciudad, acercate a Pizzas del Tano, de martes a domingos, de 20 a 00 hs, en Mitre 582. Una experiencia que une tradición napolitana, espíritu tandilense y mucho corazón.

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