En una semana marcada por despedidas, nuevos ingresos y reacomodamientos institucionales, el Consejo Escolar de Tandil inició una nueva etapa con la asunción de Diana Balbín como presidenta del cuerpo. Se trata de un hecho poco frecuente en las últimas dos décadas, ya que el organismo vuelve a tener una conducción con mayoría del peronismo, algo que no ocurría desde 2005.

En diálogo con La Mañana, programa que se emite por El Eco Streaming, Balbín subrayó que la presidencia no debe leerse en términos personales, sino como el resultado de un trabajo colectivo. “Uno ocupa el cargo porque responde a un recorrido y a una mirada sobre Tandil en el corto, mediano y largo plazo, poniendo en agenda a la educación pública”, expresó.

Docente de profesión y militante del sector educativo, la flamante presidenta remarcó que el desafío central será conducir el Consejo Escolar desde una lógica de acuerdos, en un contexto local complejo y con un escenario nacional que calificó como “muy hostil” para la educación pública.

Un cambio histórico en el Consejo Escolar

Balbín recordó que el Consejo Escolar es un organismo desconcentrado de la Provincia de Buenos Aires, regido por la Ley Provincial de Educación N° 13.688, y que sus integrantes son electos en la misma boleta que las autoridades municipales.

En ese marco, sostuvo que una de las prioridades de la nueva conducción será agilizar las respuestas a las necesidades de las escuelas. “La respuesta rápida se logra con buenos acuerdos. No solo para atender lo urgente, sino también para construir agenda y poner en valor todo el trabajo que se hace para que las escuelas funcionen”, señaló.

Consultada sobre la articulación con la Provincia, aseguró que Tandil no ha sufrido demoras ni obstáculos en el envío de recursos, aunque advirtió que la retirada del Estado nacional del financiamiento educativo genera mayores tensiones presupuestarias. “Hoy la Provincia está afrontando responsabilidades que antes tenían respaldo nacional, y eso complejiza el escenario”, afirmó.

Obras en marcha y edificios escolares

En relación con la infraestructura, Balbín indicó que el distrito atraviesa el cierre del año con varias obras en ejecución. Entre ellas mencionó a la Escuela Primaria N° 21 y la Escuela N° 7, esta última con mayores dificultades pero actualmente en proceso de refacción para iniciar el próximo ciclo lectivo en condiciones adecuadas.

También se refirió a la Escuela Primaria N° 25 y la Secundaria N° 21 del Paraje El Molino, que funcionan en espacios alternativos mientras se finalizan las obras, y al nuevo edificio del establecimiento de La Canal, donde se trabaja en la adecuación de espacios para extender la jornada y el comedor escolar.

Sobre la nueva sede de la Escuela Técnica N° 3, confirmó que el proyecto se encuentra en proceso de licitación. Recordó que la obra se inició en 2017 y que hoy se reencauza con fondos provinciales y del Fondo Educativo municipal. “Es un ejemplo claro de lo que sucede cuando el Estado nacional se retira del financiamiento de la educación técnica”, sostuvo.

Transporte rural y comedores escolares

Otro de los temas abordados fue el transporte escolar rural, una problemática recurrente en el distrito. Balbín explicó que ya se trabaja administrativamente para llegar al inicio del próximo ciclo lectivo con los recorridos definidos y las licitaciones encaminadas, aunque reconoció dificultades para cubrir algunos trayectos por falta de oferentes.

“No minimizamos ningún recorrido sin cobertura, porque cuando no hay transporte el alumno no llega a la escuela y también se ve afectado el acceso a otros servicios”, señaló, y convocó a empresas interesadas a acercarse al Consejo Escolar para asesorarse como proveedores del Estado.

En cuanto a los comedores escolares, destacó que el año se transitó con un esquema de pagos ordenado y buen financiamiento, lo que permitió garantizar alimentos y ampliar cupos cuando fue necesario. Indicó que la extensión de la jornada completa en unas diez escuelas incrementó la cantidad de alumnos que almuerzan en el sistema educativo.

Si bien evitó dar cifras definitivas, reconoció que se percibe un aumento de la demanda alimentaria en algunos establecimientos. “Da tranquilidad poder dar respuesta, pero también genera preocupación porque refleja necesidades que uno desearía que no existan”, admitió.

Los desafíos de la nueva gestión

De cara a su gestión, Balbín planteó como objetivo fortalecer el rol del Consejo Escolar en espacios de trabajo conjunto con otros organismos y con la comunidad educativa. En ese sentido, valoró el compromiso de cooperadoras y familias que, en un contexto económico complejo, vuelven a involucrarse activamente en las escuelas.

“Cuidar la educación es una tarea de todos los tandilenses. Pensamos distinto, pero hay puntos en común que no pueden faltar”, afirmó, y se mostró optimista respecto a la posibilidad de sumar voluntades y mejorar el funcionamiento del sistema educativo local.

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