Cómo proteger la piel en verano durante el tratamiento oncológico
Desde Lalcec brindaron recomendaciones para evitar los efectos adversos del sol durante tratamientos como la quimioterapia. Aconsejan no exponerse entre las 10 y las 16 y utilizar protector con factor 50.
:format(webp):quality(40)/https://cdn.eleco.com.ar/media/2025/12/verano_protector.jpg)
El verano es una época ideal para disfrutar del aire libre, pero también es un momento en el que se deben redoblar los esfuerzos para proteger la piel. La exposición al sol puede tener efectos dañinos a corto y largo plazo, por lo que es esencial adoptar medidas preventivas para cuidar la salud dermatológica, fundamentalmente si se está bajo un tratamiento por cáncer.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl director médico y coordinador del Área de Acompañamiento al Paciente de Lalcec, Carlos Silva, explicó: “Algunos medicamentos usados para tratar tumores pueden generar efectos secundarios en la piel o volverla más sensible a la radiación solar, pero no ocurre con todos los tratamientos. Tanto la quimioterapia como la inmunoterapia pueden producir distintos tipos de lesiones”.
“Generalmente, la gran mayoría son reversibles y no dejan secuelas. De todos modos, es importante consultar al médico para confirmar si el fármaco que uno está recibiendo puede estar causando efectos secundarios en la piel y hacer un seguimiento adecuado. Muchas veces las personas pasan por alto ciertas señales porque piensan que son irrelevantes o que no tienen relación con el tratamiento”, agregó.
Silva señaló algunas recomendaciones a tener en cuenta: “En principio es fundamental evitar la exposición al sol en las horas pico, incluso cuando está nublado, ya que los rayos atraviesan las nubes. También es importante usar protector solar con FPS 50, aplicarlo antes de salir y volver a colocarlo cada dos horas o después de actividades acuáticas”.
Se recomienda además usar ropas claras y de mangas largas para cubrir brazos y piernas, que son las partes más expuestas. Por último, hay que proteger el cuero cabelludo con un sombrero, ya que esa área también suele recibir mucha radiación solar.
Durante el tratamiento oncológico es importante tomar algunos recaudos para proteger la piel:
- Evitar el sol entre las 10 y las 16, o directamente siempre que la sombra sea más corta que la propia altura.
- Usar protector solar, idealmente con FPS 50, y reaplicarlo según indicación.
- No tomar sol si está recibiendo medicamentos que sensibilizan la piel. Consultar al oncólogo cuáles de las drogas del tratamiento pueden aumentar la sensibilidad a la radiación ultravioleta.
- Mantener una buena hidratación, tanto tomando suficiente agua como usando cremas hidratantes diariamente.
“Se recomienda realizar un control anual con un dermatólogo, preferentemente antes del verano. De ese modo se recibirán indicaciones para el cuidado de la piel y también se podrán detectar lesiones de alto riesgo que requieren de seguimiento”, prosiguió Silva.
Para finalizar, el especialista sumó: “Es importante consultar antes si aparece alguna lesión que persiste en el tiempo, es asimétrica, tiene bordes irregulares, cambia de color o es muy oscura, supera los seis milímetros o crece, sangra o muestra algún cambio importante”.
Más de 143 años escribiendo la historia de Tandil