Creatividad y metáfora, en torno a la Infancia, obras patrimoniales en el Museo
El Mumbat reúne una selección de obras de su patrimonio en una propuesta que busca orientar la mirada, desde una perspectiva artística, hacia la figura del niño y la diversidad de enfoques plásticos en torno al sentido de la infancia.
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Quien visite el museo durante el mes de septiembre podrá disfrutar de tres salas con obras patrimoniales. La selección, curada por la directora del Mumbat, Indiana Gnocchini, aborda la multiplicidad de miradas en torno al concepto de la niñez presentes en las colecciones “Grandes Maestros” y “Artistas Contemporáneos”. Esculturas, fotografías, pinturas, grabados, objetos; obras que van del realismo al expresionismo y también al arte conceptual, son las que conforman el conjunto que pone en dialogo a artistas de diferentes paradigmas.
Importantes referentes del arte nacional se hacen presentes en sala, destacados artistas de la pintura, el grabado o la escultura. Entre las obras pictóricas exhibidas, se puede apreciar la icónica obra de Antonio Berni “El gato gris”, un clásico que no prescribe para los visitantes asiduos del Museo. También, entre las casi veinte piezas, se lucen las pinturas de Ana Weiss de Rossi, Ramón Gómez Cornet, Susana Fedrano, Víctor Carnevale y Milo Lockett, retratos anónimos en su mayoría. El grabado, por otro lado, se destaca en la importante xilografía de María Inés Tapia Vera “La siesta”, que dialoga en sala con una pieza de José Santiago Chierico: “Sueño de huérfano”, una escultura en yeso realizada en el año1979, que también se remite a ese momento de descanso y ocio que caracteriza a la siesta.
También hay espacio para el arte conceptual. El importante artista plástico argentino León Ferrari se puede disfrutar en el marco de esta selección de obras. A través de “Sin título”, un objeto intervenido con un poderoso mensaje, Ferrari buscó poner en evidencia los dobles discursos y estrategias de poder que en marcadas ocasiones violentan los derechos de los más vulnerables.
Modelos de niñez, miradas desconocidas cargadas de sentido, poses cotidianas y el juego conversan en las tres salas del Museo. Los caballos perdidos de algún tiovivo se vislumbran en la fotografía de Cristina Fresca, muy cerca, cobran vida las marionetas en la obra de Errecart.
En palabras de Gnocchini, “Plantear el concepto de la niñez en el arte nos lleva a bucear en diferentes épocas”, ya en la Grecia antigua y Roma se pueden apreciar las primeras imágenes de niños, retratados como símbolo de pureza.
Posteriormente, durante un largo periodo de tiempo, se percibe la ausencia de niños en el arte, reapareciendo estos en la Edad Media a través de representaciones del niño Jesús.
“El arte pasó por distintas corrientes, como el Romanticismo y el Impresionismo, hasta surgir el abstracto. Al aparecer la fotografía, se retoma el registro de lo que está sucediendo socialmente con la infancia para capturar fielmente el contexto, y solo a partir del siglo XIX surge una oleada de sucesos que marcan la historia de la infancia. Esta muestra patrimonial testimonia algunas visiones de artistas argentinos, de la Colección de Grandes Maestros y Colección Artistas Contemporáneos, que directa o indirectamente nos acercan su mirada de la niñez, lo primitivo, los vínculos familiares, así como el retrato y las costumbres en torno a la infancia”.
La exhibición patrimonial permanecerá en sala hasta el 30 de septiembre al igual que las muestras “Maestros del Ipat” y “Arqueóloga de sí misma” de Matilde Marín.
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