Familiares de Magalí Gómez siguen exigiendo justicia a 6 meses del accidente que se cobró su vida

La joven de 23 años murió cuando la moto en la que viajaba como acompañante fue impactada por una camioneta en el kilómetro 170 de la Ruta 226 el 24 de diciembre. Su hermana, Nayla Gómez contó que se manifestaron en Fiscalía para pedir respuestas. “La verdad que lo que paso con Magalí nos hizo pedazos a todos”, expresó.

A pocos días de cumplirse 6 meses del siniestro vial que se cobró la vida de Magalí Gómez, de 23 años, sus familiares siguen exigiendo que se haga justicia porque consideran que no se trató de un simple accidente sino que hay responsables del choque y que deben purgar una pena. 

Cabe recordar que Magalí Gómez tenía 23 años y era mamá de cuatro hijos, el más pequeño de 7 meses al momento de su muerte. La motocicleta Gilera Smash en la que circulaba como acompañante fue impactada por alcance por una camioneta Dodge RAM el 24 de diciembre alrededor de las 3 am.  Ambos vehículos circulaban en el mismo sentido y Magalí falleció a raíz de las graves heridas que sufrió a raíz del impacto.

Su hermana, Nayla Gómez contó que el miércoles 14 de julio en horas de la mañana se presentaron en la Fiscalía con sus familiares y cortaron la calle Uriburu con el fin de hacerse oír y ser recibidos por el fiscal, ya que no conseguían de otro modo que los atendieran.

“Nos daban muchas vueltas para que nos atendiera el fiscal Gustavo Morey, entonces decidimos hacer una manifestación pacífica cortando la esquina de Uriburu y logramos que mi hermana mayor pudiera entrar a hablar con el juez”, explicó.

Durante ese encuentro, el juez “le comunicó a mi hermana que la causa está en instancia de investigación, que están esperando la autorización de una nueva pericia a la camioneta para constatar la velocidad exacta del impacto, y se esperara que se realicen estas pericias para que ambos imputados, Portela y Agüera, declaren, hasta el día de la fecha seguimos esperando que ellos declaren”.

En la causa están imputados Daniel Alfonso Portela, el conductor de la camioneta y Nahuel Agüera, quien guiaba la motocicleta.

“Así que hasta el momento no hubo avances por lo que le dijo el fiscal Morey a mi hermana mayor, porque pudo entrar ella sola a hablar con él”, señaló.

En tanto, cuestionó que la Fiscalía se basa en lo que dice la Instrucción Penal Preparatoria donde quedó establecido que los vehículos circulaban en sentido Azul-Tandil. “Pero no fue así, porque ya un testigo declaró que el accidente fue Tandil-Azul, como nosotros siempre lo veníamos diciendo”, manifestó.

Respecto a la velocidad de la camioneta, consideró que “la foto lo dice todo y verla en persona también. Mientras que el chico de la moto iba lamentablemente borracho”.

“Nos hizo pedazos a todos” 

Por otro lado, explicó que “yo al chico de la moto que se estaba viendo desde el 11 de diciembre con mi hermana lo conocí la misma noche que mi hermana salió a dar la vuelta, y después no tuvimos contacto. El 25 cuando estábamos enterrando a Magalí a él le estaban dando el alta, pero jamás se acercó a nosotros”.

“Al conductor de la camioneta la madrugada del accidente lo tuvimos en frente en el Hospital y nunca se acercó a decirnos algo, como lo lamento, no los vi. Siempre nos miró con  cara de cínico directamente”, cuestionó.

En tanto, recordó que “Magalí dejó a cuatro peques, los mellis que cumplieron 4 años hace poquito, el otro cumplió 3 y la bebé que cumplió un año”.

“Es un tema ver a los nenes, que miran por la ventana porque esperan que la madre vuelva, nosotros lo sobrellevamos como podemos, la verdad que lo que pasó con Magalí nos hizo pedazos a todos”, confió. 

Por último, contó que “los nenes viven con mi mamá y mi papá, ellos están a cargo de mis cuatro sobrinos”.