De cara a los festejos por el inicio del nuevo año, el director de Inspección y Habilitaciones detalló el esquema de trabajo que se llevará adelante en la ciudad para garantizar el orden y la seguridad. El funcionario confirmó que el operativo será similar al desplegado durante la Navidad, con un fuerte enfoque en la fiscalización de los eventos masivos y la atención de denuncias vecinales a través de la línea de emergencias.

Según explicó, el personal municipal cumplirá con un cronograma de guardias que hoy comenzará a las nueve de la mañana y se extenderá hasta las 18. Posteriormente, los equipos retomarán las tareas en la madrugada del 1 de enero, desde las dos hasta las ocho. Finalmente, se estableció un tercer turno que iniciará a las 14 horas del primero y concluirá a las seis de la mañana del segundo día del 2026.

Camgros resaltó que la Municipalidad de Tandil mantendrá activa su guardia permanente para canalizar cualquier tipo de denuncia que ingrese por la línea 103. “Una vez recibido el llamado, automáticamente van los inspectores al lugar”, aseguró, indicando que el sistema de respuesta inmediata funcionará con la misma dinámica que se aplica durante todo el año.

Respecto a la dinámica de las intervenciones, el director hizo una distinción clara entre las reuniones de carácter familiar y aquellos eventos que intentan lucrar sin la debida autorización. En ese sentido, remarcó que las celebraciones en viviendas particulares suelen generar reportes por ruidos elevados, situación ante la cual se prioriza el diálogo, la concientización y la convivencia ciudadana.

Tres eventos habilitados

Para esta festividad, la comuna autorizó el funcionamiento de tres eventos masivos que cumplimentaron con la totalidad de la normativa vigente. El primero de ellos se desarrollará en el predio de la Sociedad Rural, una propuesta que ya cuenta con cinco años de trayectoria en diferentes puntos de la ciudad.

El segundo corresponde a la fiesta denominada “Yellow”, organizada en el Club Uncas, que posee una tradición de más de diez años en el calendario nocturno local. La tercera propuesta autorizada es una fiesta de música electrónica que tendrá lugar en un salón de eventos ubicado en las inmediaciones de la Base Aérea, repitiendo la experiencia del año pasado.

Camgros subrayó que “cada uno de los eventos cumplimentó con todos los requisitos para ser habilitado”. Entre las exigencias se destacaron el pago de los derechos de habilitación, la obtención del REBA (Registro Provincial para la Comercialización de Bebidas Alcohólicas) y la presentación de informes de capacidad visados por Bomberos. Asimismo, en caso de existir puestos de venta de comida, se exigieron las actas de la Dirección de Bromatología.

Como parte del protocolo previo, se programó para hoy una preinspección en los lugares junto a personal de Bomberos para verificar que la documentación coincida con las condiciones reales de cada predio. Además, a partir de las dos de la mañana del 1 de enero, los inspectores verificarán in situ la presencia de ambulancias, los cortes de calle, el cacheo y la solicitud de DNI.

Cabe recordar que este año, a diferencia de los anteriores, desde el Gobierno Local decidieron no permitir la reprogramación de fiestas al aire libre en caso de lluvia. Esta medida surge tras los conflictos vecinales ocurridos el año pasado en el Club Uncas, donde una fiesta reprogramada generó malestar en la comunidad.  Los organizadores ya fueron advertidos de esta normativa hace meses para que tomen los recaudos necesarios.

Reuniones en hogares y espacios públicos

El funcionario realizó un pedido de responsabilidad para quienes decidan festejar en el ámbito privado. Camgros apeló a la concientización de los vecinos, recordando que “el derecho por festejar termina cuando empieza el derecho del otro vecino de querer descansar”.

Ante denuncias por ruidos molestos en domicilios, los inspectores trabajarán inicialmente en la sensibilización de los propietarios. Sin embargo, Camgros advirtió que, si se detecta la venta de entradas o de alcohol, la situación cambiará drásticamente. “Sería un evento no habilitado y ahí sí se trabaja con la policía, se infracciona y se evacúan los lugares”, explicó.

Finalmente, el funcionario reiteró que, de no mediar una actitud colaborativa por parte de los responsables de viviendas ante denuncias reiteradas, se procederá a labrar las infracciones correspondientes. El objetivo de la Municipalidad de Tandil es que la llegada del nuevo año transcurra sin incidentes y bajo el marco de la legalidad.

En cuanto al uso del espacio público, particularmente en la zona del Dique del Fuerte y otros espacios verdes donde se prevé una mayor concentración de jóvenes, la seguridad quedará bajo la órbita de las fuerzas policiales. El personal municipal realizará recorridas preventivas y colaborará de forma coordinada con la policía en caso de detectarse inconvenientes.

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