Una convocatoria que circuló con fuerza en redes sociales y en ciudades vecinas bajo la consigna “vamos que Tandil explota” encendió las alertas en el Municipio y derivó en uno de los operativos de seguridad más importantes desplegados en la ciudad en el último tiempo. 

Fue, también, la oportunidad para aplicar por primera vez y de manera masiva, las modificaciones en la denominada "Ordenanza de las motos" aprobada días atrás de forma unánime por el Concejo Deliberante.

Durante el fin de semana, y de manera sostenida entre el viernes y el domingo, la Secretaría de Protección Ciudadana local coordinó un dispositivo especial junto a fuerzas provinciales para contener la llegada de motovehículos y cuatriciclos que, según advertían los mensajes difundidos en redes sociales, planeaban realizar maniobras peligrosas y generar desorden en la vía pública.

El resultado del operativo fue contundente: más de cien motos secuestradas, diez personas detenidas y más de 250 actuaciones vinculadas a infracciones de tránsito y contravenciones.

Además, se iniciaron causas penales en aquellos casos en los que los rodados presentaban pedidos de secuestro o captura, mientras que otras 24 infracciones deberán ser ahora evaluadas por el Juzgado de Faltas Municipal.

La secretaria de Protección Ciudadana, Alejandra Marcieri, detalló los alcances del operativo en una entrevista en “Tandil Despierta”, por ECO TV y la 104.1 FM, donde explicó que el tenor de la convocatoria obligó a una respuesta diferente a la aplicada en otros eventos similares.

“Lo que nos preocupaba era el explote y las motos que vienen de afuera”, señaló la funcionaria, en referencia a la posible llegada de grupos organizados desde otras localidades; algunas vecinas, otras más alejadas.

Marcieri recordó que durante el transcurso del año la ciudad ya enfrentó situaciones complejas, como el aniversario del grupo de moteros “Moto Sierras”, que reunió a más de 300 vehículos, o los controles implementados durante la Fiesta del Queso. En esos casos –destacó-, los operativos fueron “discretos pero efectivos”. Y todo esto, sin contar los diversos desmanes sufridos –y denunciados- por la comunidad durante los restantes fines de semana.

Sin embargo, el tono de la convocatoria reciente, que hacía referencia explícita al descontrol, elevó el nivel de preocupación.

Durante las dos semanas previas al fin de semana, el Municipio trabajó en una mesa conjunta con el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires para diseñar un “gran dispositivo” que incluyó más de 80 efectivos policiales, alrededor de 20 inspectores de tránsito municipales y la participación del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) y la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI).

El despliegue contempló operativos cerrojo en los accesos a la ciudad y en los peajes, controles en rutas y en distintos sectores del ejido urbano, además de operativos dinámicos coordinados desde el Centro de Monitoreo. También hubo comunicación permanente con municipios vecinos para detectar los flujos de ingreso de motovehículos hacia Tandil.

Desde el Municipio informaron que para la implementación del operativo se realizó una inversión cercana a los 10 millones de pesos, financiada con fondos municipales. 

De ese total, $3.100.000 correspondieron a horas adicionales y apoyo a fuerzas de seguridad; $4.800.000 se destinaron a combustible para móviles de las fuerzas policiales, Control Urbano Vehicular y Centinela en Territorio; y $1.725.000 a horas extras de personal municipal.

En ese cálculo no se incluyeron los recursos aportados por el Ministerio de Seguridad bonaerense.

Participación a través de Centinela

Uno de los pilares del operativo fue la participación ciudadana a través de la aplicación Centinela.

Según explicó Marcieri, la herramienta cuenta actualmente con más de 9.000 usuarios activos y se consolidó como una fuente clave de información durante el fin de semana.

“Son ojos nuestros en la ciudad que colaboran todos los días, no solamente en este evento, sino desalentando otros delitos”, sostuvo la funcionaria en El Eco Multimedios.

Las alertas enviadas por vecinos permitieron un monitoreo constante y una respuesta rápida ante situaciones de riesgo. “Este trabajo mancomunado entre las fuerzas de seguridad y la comunidad nos permite anticipar hechos, ordenar la circulación y desalentar conductas que afectan la convivencia y la seguridad vial”, indicaron desde la Secretaría de Protección Ciudadana.

En el plano judicial, Marcieri anticipó un trabajo intenso tanto para la Justicia de Faltas como para la Justicia Penal. “Nosotros empezaremos a procesar las infracciones y todo lo recabado por monitoreo, y también elevaremos a la Justicia Penal aquellas cuestiones que consideramos de índole grave”, afirmó.

Entre los hechos más serios registrados durante el fin de semana, la funcionaria mencionó un cuatriciclo que intentó atropellar a inspectores municipales y efectivos policiales en la esquina de Vicente López y Avenida del Valle, y un automóvil con pedido de secuestro que, tras una persecución, fue interceptado en la intersección de Córdoba y Trabajadores Municipales.

“Los tenemos identificados, ahora vamos a iniciar las acciones legales. Son hechos que -entiendo yo- son graves y requieren una mirada especial de parte de la Justicia”, remarcó.

El rol de la nueva Ordenanza

En este contexto, Marcieri se refirió a la Ordenanza de control urbano vehicular recientemente aprobada por el Concejo Deliberante, impulsada por el Ejecutivo municipal, aunque con modificaciones respecto del proyecto original presentado por su área.

“La Ordenanza salió, pero no como nosotros la presentamos. Tuvo modificaciones que harán más dificultoso probar el hecho para llegar al allanamiento”, explicó la funcionaria.

Según la secretaria, la principal preocupación está vinculada a un artículo que condiciona la aplicación de la norma a la constatación de que la huida de un control haya puesto en riesgo la vida de terceros. 

“Nosotros creíamos que el mero hecho de huir del control y seguir haciendo maniobras peligrosas ya ponía en riesgo la vida, aunque no sea en ese lugar puntual”, argumentó.

La secretaria advirtió que la redacción actual obliga al Municipio a reunir pruebas más complejas, como testigos o elementos de posicionamiento, para demostrar no solo la evasión del control sino también el riesgo generado.

También sostuvo que el ruido molesto, por sí mismo, afecta la salubridad y la seguridad de la población, una mirada que -consideró- no quedó plenamente reflejada en la norma.

Pese a las críticas, Marcieri reconoció que la Ordenanza fue aprobada por unanimidad, incluido el bloque oficialista, y sostuvo que “antes de no tener nada, siempre una herramienta es buena”.

En ese sentido, aseguró que el Municipio trabajará con la normativa vigente y confió en que los jueces de Faltas evaluarán las pruebas con una comprensión integral de la problemática.

Robo de motos, el delito más frecuente

Durante la entrevista, la secretaria también abordó la situación delictiva en la ciudad y, en particular, el robo de motos, que continúa siendo el delito más frecuente en Tandil.

No obstante, destacó un descenso significativo en los últimos meses. “Estábamos teniendo entre 35 y 40 robos de motos mensuales. Este mes se bajó al 50% de eso”, precisó.

Marcieri atribuyó la mejora a un mayor trabajo policial en la calle, a un cambio en la cúpula de la fuerza y a una mejor coordinación entre los distintos estamentos. “No solo bajó la incidencia, sino que se están esclareciendo rápidamente los hechos”, señaló.

En ese esquema, volvió a destacar el rol de la aplicación Centinela, que pasó de tener unos 3.000 usuarios el año pasado a acercarse actualmente a los 10.000.

“Estamos creando una comunidad. Tener esta aplicación nos lleva a ser una comunidad más segura y a estar atentos como vecinos al bien común”, afirmó.

A diario –añadió-, la plataforma recibe alertas por motos circulando de manera sospechosa, personas merodeando o intentos de apertura de vehículos, lo que permite desalentar una gran cantidad de delitos gracias a la participación comunitaria y la articulación con el sistema multiagencia.

Flota y personal insuficientes

En El Eco Multimedios, Alejandra Marcieri hizo referencia a los recursos disponibles en materia de prevención y combate al delito y a las necesidades que están pendientes.

En ese marco reconoció que, pese a las mejoras, la ciudad aún presenta niveles bajos de patrullaje y que se continúa gestionando la incorporación de nuevo personal policial fijo. En ese sentido, confió en la llegada de agentes egresados, reclutados en Tandil, tal como lo anticipó el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso.

En cuanto a la flota vehicular, anunció que próximamente se entregarán cuatro móviles (tres automóviles y una camioneta) y que, en los días siguientes, se sumarán cinco camionetas más.

Si bien, según comunicó, todos los vehículos cuentan con VTV, lamentó que durante el fin de semana dos móviles resultaran dañados en choques durante los operativos, lo que refleja —señaló— la complejidad y el riesgo que implican este tipo de controles.

Desde el Municipio indicaron que operativos de estas características volverán a realizarse cuando la situación lo requiera, con el objetivo de preservar el orden público, la seguridad vial y la convivencia ciudadana.

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