Un nuevo hecho de inseguridad se vivenció en la ciudad de Tandil el pasado viernes 29 de agosto. En horas de la madrugada, un delincuente rompió los vidrios de un local comercial ubicado en avenida Balbín al 1300 y protagonizó un importante robo.

En diálogo con El Eco de Tandil, Exequiel Crevecoeur, el dueño de “Zona de Quesos”, expresó que se enteró de lo sucedido a través de vecinos de la zona que dieron aviso del hecho delictivo. “Cuando llego al local y visualizo las cámaras de seguridad, me doy cuenta de que el delincuente estuvo toda una hora robando productos del negocio como si nada”, manifestó con indignación.

Según el testimonio del damnificado, durante el momento del robo “pasaban muy pocos autos y, si había movimiento, se hacía el distraído”. Crevecoeur señaló que el delincuente transitó el lugar desde las 2:00 hasta las 3:00 de la madrugada, llevándose diferentes productos escondidos dentro de una mochila en múltiples oportunidades.

Entre los objetos sustraídos se encontraron quesos, salamines, botellas de bebidas alcohólicas y una suma de dinero que se encontraba en la caja registradora. “Nunca dejamos el dinero en la caja, pero justo ese día nos quedó ahí”, lamentó. Además, también se registraron daños materiales como la rotura de los vidrios de las ventanas del negocio.

La alerta de robo se emitió a través de las cámaras del Centro de Monitoreo de Tandil, desde donde se visualizó a un hombre en accionar sospechoso y se emitió el aviso a las autoridades policiales.

“La policía llegó cerca de las cuatro de la mañana y empezó a reírse de la situación o a hacer chistes. Nunca tuvo intenciones de salir a buscar por la zona a ver si encontraban al culpable, ellos vinieron a ver que pasó y solamente reírse”, declaró el dueño del negocio con profundo malestar.

Los damnificados ya realizaron la denuncia policial correspondiente y se encuentran a la espera de novedades. “Es muy triste. Realmente es muy indignante porque uno trabaja de lunes a lunes, entonces amanecer y encontrarse con esta noticia te genera mucha frustración”, confesó Crevecoeur.

“Aún más indignante es ver los videos en donde se evidencia que estuvo una hora robando como si nada, la policía llegando tarde y con ganas de reírse de la situación. Eso es mucho peor”, concluyó.

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