La noche en que el Pity Álvarez se prendió fuego en el Anfiteatro
Caos, espera, tensión y un final apoteósico: así fue el recital de Viejas Locas en Tandil que quedó para siempre en la memoria de quienes lo vivieron.
En Alto Día, el programa sabatino de El Eco Multimedios que se emite de 11 a 13 por El Eco Streaming, Eco TV y Tandil FM 104.1, el productor y responsable del bar Macanudo, Beltrán Cesio, desempolvó una anécdota que retrata a la perfección la dualidad de Cristian "Pity" Álvarez: el genio artístico y la figura controversial.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl relato transportó a la audiencia a una noche inolvidable en Tandil, en noviembre del 2016, marcada por la incertidumbre, el caos y, finalmente, uno de los recitales más memorables que se recuerden en la ciudad, en el Anfiteatro Martín Fierro.
Recordó Cesio que Viejas Locas venía de cancelar una fecha anterior y la tensión en Tandil era palpable. El recital se demoraba y Pity no aparecía. La misión de ir a buscarlo recayó en el propio Beltrán. "Lo tuve que ir a buscar al Hotel Plaza", relató.
La escena que encontró al entrar a la habitación fue surrealista. "Me atiende con la cara que parecía Los Andes, toda rota, con marcas profundas", describió. La vestimenta del músico no era menos llamativa: "Unas calzas rosa chicle a la mitad del culo, una pupera... yo me derrito", confesó entre risas. Para completar el cuadro, Pity y un acompañante se encontraban con guantes de boxeo puestos, supuestamente "entrenando" a las cuatro de la tarde.
A pesar de lograr que el cantante llegara al Anfiteatro, la espera continuó. El músico se encerró en su camarín y se negaba a salir. Las horas pasaban y el público comenzaba a impacientarse. La situación llegó a un punto crítico. "Ahí hay una historia así media macabra que lo sacaron como 'salís o se pudre todo'", comentó Cesio, dejando entrever que la producción tuvo que darle un ultimátum para que comenzara el espectáculo.
Un show consagratorio: fuego literal y musical
Cuando finalmente Pity subió al escenario, la larga y caótica espera valió la pena. "Da el mejor show de toda la vida", sentenció Cesio. Durante dos horas, el líder de Viejas Locas desplegó todo su talento y energía, cautivando a un público que había pasado de la incertidumbre a la euforia.
El clímax de la noche llegó con la canción "Fuego". En un acto de performance que quedó grabado en la retina de los presentes, Pity llevó el título del tema a la realidad. "Va hasta un costado del escenario, agarra un encendedor y se prende fuego el pelo tocando la guitarra", recordó Cesio. No conforme con eso, caminó los 15 metros hasta el otro extremo del escenario y repitió el acto, prendiéndose fuego la otra mitad del cabello.
"Después quedó como Cerati, todo hermoso, todo relindo. Una cosa... y la gente sacada", concluyó Cesio.