Hábitos simples para cuidar la salud visual todos los días
Cinco consejos para proteger la vista diariamente.
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La vista es uno de los sentidos más valiosos para interpretar el mundo y movernos en él, ya que a través de los ojos distinguimos colores, formas, luces y contrastes; leemos, trabajamos, aprendemos y también expresamos emociones. Sin embargo, muchas veces damos por sentado su funcionamiento y no prestamos atención a los pequeños gestos que, con el tiempo, pueden comprometer la salud ocular.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEl incremento del tiempo frente a pantallas, las jornadas laborales extensas y el estrés visual asociado al uso continuo de dispositivos generan fatiga, sequedad y sensación de cansancio. A esto se suma un dato importante: según recomendaciones del Ministerio de Salud y de organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud, los chequeos periódicos y la prevención son claves para detectar alteraciones visuales a tiempo y evitar complicaciones futuras.
Para profundizar en estos cuidados, tomamos como referencia el trabajo de especialistas argentinos como el médico oftalmólogo Enrique Malbrán (OSDE) y el doctor Javier Ocampos, del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Austral, quienes destacan que la salud visual requiere hábitos cotidianos, buena alimentación, protección solar y descansos adecuados. Acá, cinco consejos respaldados por profesionales para incorporar en la rutina.
Cinco tips diarios para proteger la vista
1. Hacer pausas visuales y aplicar la regla 20-20-20: una de las recomendaciones más difundidas por oftalmólogos es la regla 20-20-20: cada 20 minutos, mirar un objeto a unos seis metros de distancia durante 20 segundos.
Como explica el doctor Javier Ocampos, este ejercicio ayuda a relajar el músculo ciliar, reducir la fatiga visual, prevenir visión borrosa y aliviar la sequedad generada por el uso intensivo de pantallas. A esto puede sumarse parpadear de manera consciente para favorecer la lubricación natural.
2. Proteger los ojos del sol: la exposición solar sin protección puede dañar estructuras oculares y contribuir a problemas como la degeneración macular. El oftalmólogo Enrique Malbrán recalca la importancia de usar anteojos de sol homologados con filtro UV 100 por ciento y elegir lentes adecuados según la actividad (por ejemplo, tonalidad gris para conducir o marrón para deportes al aire libre). No se trata de cualquier lente tintado, deben bloquear radiación UVA y UVB para ser realmente protectores.
3. Mantener una buena higiene ocular y evitar frotarse los ojos: el parpadeo y la película lagrimal son mecanismos naturales de protección, pero requieren cuidados. Malbrán recomienda lavar párpados y pestañas diariamente y, ante sequedad, utilizar lágrimas artificiales en lugar de frotar los ojos. Ocampos también señala que, en caso de alergias, es mejor optar por gotas específicas indicadas por profesionales. Mantener manos limpias y no compartir maquillaje reduce el riesgo de irritación o infecciones.
4. Nutrir la vista desde la alimentación: la nutrición también influye en el desempeño visual. Según los especialistas una dieta rica en antioxidantes, omega 3 y vitaminas A, C y E contribuye a proteger la retina, mejorar la película lagrimal y retrasar el envejecimiento ocular. Entre los alimentos recomendados están los vegetales verdes, zanahoria, batata, maíz y huevo, cítricos, frutos rojos, frutos secos, pescados grasos y semillas como chía o lino.
5. Realizar controles oftalmológicos periódicos: los chequeos preventivos son fundamentales en todas las etapas de la vida. Un examen de fondo de ojo permite detectar a tiempo patologías como glaucoma, cataratas, degeneración macular, diabetes ocular o problemas refractivos. Las frecuencias recomendadas varían según la edad: controles en la infancia, cada dos años en adultos jóvenes sin patologías y anualmente a partir de los 40 años o en personas con factores de riesgo (diabetes, hipertensión, antecedentes familiares).