De la huerta a la mesa: cinco tips para aprovechar al máximo tus plantas
Concejos para que sacarle provecho a todas tus plantas.

Tener una huerta en casa es mucho más que cosechar alimentos, es recuperar el sabor, la frescura y la diversidad que muchas veces se pierden en los productos industrializados. A raíz de una charla con Verónica Nozieres, referente local en cocina agroecológica, pudimos validar que las verduras y hortalizas cultivadas en el hogar “superan en calidad a las conseguidas en supermercados” y tienen un potencial nutritivo muy superior.
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Accedé a las últimas noticias desde tu emailEsto no es casualidad: un estudio comparativo del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) demostró que en 50 años se produjo una caída significativa en nutrientes de frutas y verduras, en parte porque las producciones extensivas priorizaron la resistencia y la duración por sobre el contenido nutricional. En cambio, las variedades de crecimiento lento y cultivos de baja escala, como los que podés tener en tu huerta, preservan mejor las vitaminas y minerales.
La clave está no solo en cultivar, sino también en saber cómo cocinar, conservar y procesar lo que cosechamos. Desde el lavado hasta el tipo de cocción, cada paso influye en cuánto de ese valor nutritivo llega finalmente a nuestro plato. Por eso, junto a los consejos de Nozieres, armamos esta guía práctica con cinco tips para aprovechar al máximo tu huerta y multiplicar sus beneficios en la cocina.
Cinco tips para potenciar el valor nutritivo de tu huerta
1. Elegí la cocción adecuada: el método de cocción puede marcar la diferencia. Según investigaciones citadas por Nozieres, hervir brócoli puede hacerle perder más de un 30 por ciento de vitamina C, mientras que cocinarlo al vapor conserva casi la totalidad de sus nutrientes. Siempre que puedas, preferí la cocción al vapor o el consumo en fresco.
2. Respetá la frescura: el tiempo que pasa entre la cosecha y el consumo afecta directamente a los nutrientes. Algunas legumbres pueden perder hasta un 77 por ciento de vitamina C en solo siete días de heladera. Lo ideal es consumir lo recién cosechado, o bien procesarlo de inmediato para conservarlo.
3. Lavado e higiene natural: antes de guardar o cocinar, es clave higienizar correctamente. Para ésto, Nozieres recomienda lavar con abundante agua y, si es necesario, dejar reposar en un recipiente con vinagre o bicarbonato de sodio para eliminar tierra y pequeños insectos.
4. Conservá de manera inteligente: cada verdura necesita un método distinto. Por ejemplo, las de hoja deben estar bien secas y en recipientes con papel absorbente; las raíces, cepilladas y guardadas en la heladera o en agua si el tiempo de consumo será mayor a 72 horas. También podés frizar en porciones después de cocer al vapor, para tener tu huerta disponible todo el año.
5. Apostá a fermentados y aderezos: el fermentado no solo conserva por más tiempo, sino que potencia los nutrientes y mejora la digestión. Otra opción práctica que propuso la referente local en cocina agroecológica son los aderezos caseros a base de vegetales, ideales para sumar sabor y salud a cualquier plato.